NUEVA JERSEY.- La comunidad dominicana en este estado, así como en la ciudad de Nueva York, se ha estremecido con la tragedia provocada por la madre dominicana Iris Tolentino, de 46 años, por asesinar de varias puñaladas a su hijo de 7 y herir a otro de 17.
Tolentino apuñaló sus hijos en el tercer piso de la casa número 96 de la calle 6 Norte, en la ciudad Paterson-NJ, lugar donde residen más de 300 mil dominicanos, según la Oficina del Fiscal del Condado de Passaic.
El hecho sucedió a eso de las 7:00 de la mañana de este sábado y cuando la policía llegó al lugar, ubicaron a tres hermanos, de 7, 15 y 17 años, dentro de la residencia.
El niño de 7 años fue llevado de urgencia al hospital St. Joseph al igual que su otro hermano de 17. Allí, el menor fue declarado muerto y el más adulto curado de heridas en brazo derecho y despachado, se informó.
La madre se opuso al arresto, y en el forcejeo llegó a herir levemente dos de los agentes que acudieron al lugar, pero al final fue detenida y traslada al hospital para un examen de salud mental.
Ha sido acusada de asesinato en primer grado, intento de asesinato, dos cargos de segundo grado de poner en peligro el bienestar de un niño, posesión en tercer grado de un arma con un propósito ilegal, resistirse al arresto, dos cargos de asalto agravado a un oficial de la ley y posesión ilegal de un arma en cuarto grado.
Si es declarada culpable enfrenta cadena perpetua. Las autoridades no revelaron qué provocó el apuñalamiento. La investigación permanece activa, se informó.
El concejal dominicano Alex Méndez, el líder comunitario Rafael Peña y los esposos Emil y Mavel Flores, todos residentes en Paterson, coincidieron en manifestar estremecimiento y lamentación por la muerte del menor a mano de su propia madre.
Mientras que, en el Alto Manhattan, José Severino, Antonio Torres, Mayra Acosta, Luisa de Ruíz, y Mariano Báez, entre otros, también lamentaron profundamente el hecho y más por ser una compatriota.
Otro filicidio sucedió este sábado en Arizona, cuando la madre Yui Inoue, de 40 años y descendencia oriental, asesinó su hija de 9 y su hijo de 7 de varias puñaladas, porque había escuchado voces que le ordenaron matarlos, declaró a la policía.