MIAMI. Máximo Caminero, un pintor que rompió una vasija de 1 millón de dólares del artista chino disidente Ai Weiwei, dijo que no tenía derecho a destruir el la obra de otra persona.

Caminero fue acusado de daño a la propiedad después de romper la pieza en una aparente protesta por la falta de representación de artistas locales en el Museo de Arte Pérez de Miami, pero el martes dijo al Miami Herald que no tenía derecho de hacerlo.

La víspera, cuando las autoridades anunciaron que enfrentaba un cargo penal por el incidente ocurrido en el museo, anunció que haría una conferencia de prensa el martes, pero la canceló y no respondió a las llamadas que le hizo The Associated Press.

Una nota pegada en la puerta del estudio del pintor afincado en Miami decía que su abogado le había aconsejado no hacer declaraciones.    Los documentos de la policía señalan que la vasija cuesta 1 millón de dólares, según las autoridades de seguridad del museo. La vasija forma parte de una instalación más de 12 piezas coloridas acompañadas de fotografías del artista chino rompiendo a su vez una vasija.