MUENSTER, ALEMANIA (dpa) – El cantante y guitarrista dominicano Jacinto Méndez se está abriendo paso en Alemania con una mezcla propia de música latina, rock y funk con la que ya ha conseguido convencer a la crítica y al público.

Méndez, de 32 años, llama «latrofunk» a este nuevo estilo que tiene elementos de conga, salsa, bachata e incluso reggae y que ha hecho que su banda Syn Ley (www.synley.com), que lidera desde hace dos años, esté atrayendo una atención cada vez mayor. Actualmente, el conjunto graba su primer álbum y pretende salir pronto de gira por Alemania y República Dominicana.

El músico nació en Santo Domingo en una familia con diez hermanos, hijo de un abogado que ocupó diversos cargos políticos durante el régimen de Trujillo. Pronto descubrió su pasión por la música y a los 16 años empezó de manera autodidacta a tocar la guitarra, contando al principio de su carrera con el apoyo de profesionales como Rafa Payán, guitarrista de Juan Luis Guerra.

«El siempre me daba consejos. Recuerdo que por aquel entonces era capaz de irme con mi guitarra hasta veinte kilómetros a pie para juntarme con gente que supiera y poder tocar con ellos», explica Méndez a la agencia dpa en Muenster, ciudad del oeste de Alemania en la que vive desde hace casi siete años.

Jacinto Méndez comenzó ganando su primer dinero en la música como profesor de guitarra, llegando a tener hasta casi sesenta alumnos al mismo tiempo. Sin embargo, con el tiempo dio el salto y empezó a vivir de la música en vivo. En Cabarete, localidad turística próxima a Santo Domingo, además de tocar en una banda, se mantuvo durante años como organizador de conciertos para otros conjuntos hasta que en 1998, atraído por una mujer, decidió trasladarse a Alemania.

«Nunca me había subido antes a un avión. Fue un choque cultural grandísimo. Había vendido todo menos la guitarra, pero ya venía con metas fijas», cuenta Méndez años después. Su llegada a Muenster, en el corazón de Westfalia, fue difícil, teniendo que recurrir al principio a trabajos duros y mal pagados. Tampoco fueron nada fáciles sus primeros pasos en la música en Alemania: «Lamentablemente duró mucho tiempo hasta que di con los músicos que tengo ahora. Hasta entonces tuve que juntarme con mucha gente que no tenía ni idea de tocar».

Sin embargo, finalmente, hace poco más de dos años, consiguió fundar Syn Ley, de la que no es sólo cantante y guitarrista, sino también compositor y productor, y comenzó llenando desde el principio las principales salas de la ciudad con su insólito estilo musical. «Ya en el primer concierto tuvimos una gran acogida por parte del público, ya que nadie se imaginaba una mezcla así. Gustó mucho esa mezcla de conga, con la guitarra, heavy… Ahí se notaba ya que el proyecto iba a funcionar», dijo.

La prensa local se ha deshecho en halagos. «Su música vive del ritmo junto a un impulso fuerte y cargado de vitalidad, que se hace camino desde su garganta hasta los corazones de los que lo escuchan», afirma el diario «Westfaelische Nachrichten».