Decenas de jugadores dominicanos deberían integrarse rápido a    sus respectivos conjuntos, ya que sus carreras están al borde del precipicio en las mayores.

Una buena labor en el béisbol otoño-invernal serviría de trampolín o vitrina para regresar a   Grandes Ligas.

Ya peloteros de la talla de Willy Taveras, Anderson Hernández, Carlos Gómez  y  Erick Almonte están jugando con la mira puesta en retornar a las mayores o de llegar en mejor condición física.

  Sin embargo, Melky Cabrera, Ronnie Belliard, Edwin Encarnación, Pedro Martínez, Willy Modesto Peña, Ronnie Paulino, Wilson Betemit y Wandy Rodríguez aún no se han presentando a sus equipos, cuando el calendario agotará la noche de hoy su décima jornada.

  En el caso particular de  Cabrera, de 26 años, quizás   prefiere conseguir un contrato en las mayores antes de ponerse los “spikes” con las Aguilas Cibaeñas.

  El jardinero sigue al pie de la letra lo que le sucedió al joven lanzador José Arredondo, quien quedó libre en la gran carpa y se lesionó la pasada temporada precisamente con el conjunto aguilucho.

 Arredondo se sometió a una cirugía  Tommy John y estaría fuera del béisbol al menos un año y medio.

Sin embargo, Belliard, Martínez, Peña y Betemit no tienen nada que perder y sólo les queda arriesgar “la faja” para volver a las Grandes Ligas, ya que le queda poco combustible.

     Belliard terminó incomodo con la gerencia del Licey y hasta anunció, la campaña pasada, que no volvería a jugar en el país. Ahora sólo queda esperar si fue un simple descontento o fue palabra de Dios.