CARACAS. AP.  Globovisión, único canal crítico del gobierno y principal medio de expresión de la oposición, enfrenta ahora el difícil reto de sobrevivir ante los procesos emprendidos por las autoridades contra dos de sus principales accionistas quienes anunciaron en la víspera que no retornarán al país.  Se trata de Guillermo Zuloaga, presidente del canal, y Nelson Mezerhane, accionista minoritario de la estación. Según sus cercanos, ambos están en el extranjero, pero han declinado precisar en qué países.  La decisión que tomó el lunes el gobierno de intervenir al Banco Federal, cuyo presidente Mezerhane es accionista de Globovisión, le abrió un nuevo frente al canal que venía resentido desde el pasado 11 de junio cuando un tribunal local ordenó la captura de su presidente, Zuloaga, y de uno de sus hijos, por un caso de un lote de vehículos que fueron encontraron almacenados en mayo del 2009 en una de las propiedades del empresario.  Las acciones contra los dueños de Globovisión y la intervención de Federal, el octavo banco en importancia del país, han agitado las tensiones en medio de la precampaña de las elecciones legislativas de septiembre próximo que se ha visto enturbiada además por el escándalo de corrupción.

Chávez niega persecución

 El presidente  Chávez negó ayer   que  “persiga” a los accionistas de la cadena opositora Globovisión,  Zuloaga y  Mezerhane, éste último también dueño de un banco de mediano tamaño intervenido ayer, como ambos empresarios han denunciado. Chávez aseguró que no tiene “nada que ver” ni con el proceso judicial contra Zuloaga por un caso de presunto “acaparamiento” de autos, ni con  intervención del Banco Federal.