Sumito Estévez, el famoso chef venezolano conocido en el país por sus apariciones  en el programa  Venezuela Mía, que se transmite por el Gourmet.com, cada vez que sale de  su  patria disfruta de las visitas  por los   mercados a los que va  “de caza” de nuevos ingredientes  que contribuyan a aportar  más sabor a su comida.

Un ritual parecido lo hace  Francisco Del Piero, de origen argentino y conductor del programa  Intervención, pero, en esta ocasión, prefirió  quedarse en su habitación del hotel Jaragua como a la espera de las sorpresas que traería su colega y amigo.

Una hora después de  llegar a nuestra   cita, un Sumito entusiasta, ataviado  de un t-shirt negro y pantalón blanco, hizo presencia. Acababa de llegar de uno de los mercados capitalinos, donde encontró, según dijo, diversos productos “curiosos”, como: salami, bacalao,  ají dulce, melaza, pan de fruta (castaña), mamajuana, yautía amarilla, entre otros.  

Saludó a  Del Piero con  efusividad, como si tuvieran años de no verse y, tras revisar varias fotografías  en  un  celular  y percatarse de nuestra presencia, comenzamos nuestro diálogo.

Una verdadera pasión.  Según el diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, la pasión es la inclinación, preferencia o deseo  ávido por alguna persona o cosa. Un concepto que los chefs Sumito  y Francisco  parecieran haber hecho suyo, pero  en relación a la cocina.

Ambos se entregan con pasión a lo que por muchos años  se ha convertido ya en parte de sus vidas: la gastronomía.

Aunque en ocasiones represente un reto, cocinar, para ellos, es uno de los más grandes placeres.

Estévez, al parecer, no se imagina su vida si no fuera chef, “pero si me tocara otra vida, creo que fuera diseñador de moda”.

“Me incliné por la cocina, creo que por mi olfato. Pues la gente elige carreras que tienen que ver con sus sentidos. Soy muy olfativo, lo fui desde pequeño y mi mama me dice que me recuerda desde niño en la cocina. Me imagino que por acción olfativa terminaba yo allí”, comenta Estévez.

Un caso distinto se dio con Francisco. Estudiaba la carrera de Relaciones Internacionales,  pero se dio cuenta que sus intereses eran otros.

“Me gustaba siempre la historia de la cocina, pero fue una pasión que adquirí luego”, señala el argentino, quien lleva varios años radicado en la ciudad de México.

Pero al parecer, no todo ha sido fácil al  haber cambiado de domicilio, pues  “la cocina de México es sumamente compleja, algo muy diferente a lo que hago. Trato de hacer las cosas simples”.

Francisco, en cambio, señala que todos los platos que realiza tienen “un toque  muy mío, pero sin faltarle el respeto a su comida”.

Un plato, una identidad. Sumito aboga porque cada país tenga un plato que lo identifique.  “Para lograr que su país se internacionalice es importante que tenga algo que lo represente y se convierta en su bandera gastronómica”, indicó.

Asegura que después que un extranjero  se interese por ese plato, terminará interesándose por el resto de la gastronomía de ese país.

Taste Santo Domingo 2011

Francisco Del Piero y Sumito Estévez participaron en el Taste Santo Domingo 2011, que se realizó en el hotel Jaragua, los días 28 y 29 de este mes, donde participaron además otros chefs nacionales e internacionales. Un evento donde surgen nuevas tendencias culinarias, pero es también donde se tejen lazos entre los profesionales de la gastronomía. Dirigido tanto a estudiantes, aficionados, como a conocedores de la alta cocina.  En ese encuentro, Sumito realizó tres platos: uno a base de mariscos, un plato tradicional de  Venezuela y  una receta especial, teniendo como base   ingredientes muy dominicanos. Este último, como un pequeño homenaje a su estadía en el país.  En tanto que Francisco preparó una comida con papas y ensaladas, entre otros platos.