Hoy 
Por momentos, el país parece vivir bajo la influencia de dos economías dispares, sin complementación ni reciprocidad. Por un lado, hay un sector privado que motoriza inversión y empleo, y por vía de consecuencia actividad comercial e ingresos fiscales. Es el mismo sector que exporta y genera divisas. Por otro lado está el Gobierno, que reporta déficit fiscal al tiempo que mantiene gastos enormes y que se endeuda cada vez más, pero que se declara incapaz de invertir lo suficiente en educación, y, al mismo tiempo, pregona un crecimiento económico que jamás se siente en la base de la pirámide social.
Esta falta de reciprocidad o complementación indica que algo anda mal con el modelo económico. El sector privado no actúa al azar cuando construye enormes plazas comerciales. Lo hace porque los resultados de sus estudios de factibilidad así lo aconsejan. Pero, aún así, con todo y ese dinamismo de la economía privada, la del Gobierno siempre está aquejada de unas insuficiencias que continuarán siendo una gran tara para el desarrollo en la medida en que el gasto público siga siendo desmedido y de pésima calidad.
En algún momento los planificadores del país tendrán que trabajar a fondo para reinventar el modelo y eliminar estas discrepancias que se traducen en profundización de la brecha social y que son una verdadera tara para el desarrollo.
Justo homenaje a Polón Muñoz
El ingeniero Roque Napoleón Muñoz está adornado de dotes morales que lo hacen excepcional.
Ha sido un abanderado de la transparencia y lo ha demostrado en todas las situaciones en que ha tenido que manejar intereses.
Ha combatido la corrupción con mucha valentía y es un referente moral para la sociedad dominicana.
Uno de los blancos que con más persistencia ha atacado es la concesión de obras y las contrataciones sin licitación o concurso.
Por esas y otras virtudes Participación Ciudadana, en su condición de capítulo dominicano de Transparencia Internacional y con motivo del Día Internacional contra la Corrupción, ha entregado a Polón Muñoz un reconocimiento por la tenacidad conque ha combatido la falta de transparencia.
Se trata de un justo y merecido reconocimiento.
