Dos estanques rodeados de arboleda recordarán víctimas del 11-S

Dos estanques rodeados de arboleda recordarán víctimas del 11-S

NUEVA YORK (EFE).- Dos estanques con un fluir constante de agua y ubicados donde estuvieron las extintas Torres Gemelas, con los nombres de las víctimas en sus paredes y rodeados de una extensa arboleda, recordarán la tragedia del 11 de septiembre del 2001, según el diseño final del memorial presentado hoy.

El proyecto denominado «Reflejando la Ausencia» es obra del arquitecto Michael Arad y del paisajista Peter Walker, y ha sido seleccionado por un jurado entre 5.201 propuestas que se presentaron a concurso, procedentes de 63 países.

Los estanques quedan hundidos nueve metros por debajo del nivel de la calle, en una amplia plaza con gran número de árboles que se ubicaría en el corazón del nuevo complejo del World Trade Center.

En el centro de la base de ambos estanques se abren otros espacios cuadrados por los que desaparece el agua que cae en cascada desde las paredes y que pretende evocar la trágica desaparición de cerca de 3.000 personas en los ataques terroristas del 11-S y del anterior atentado contra el complejo, en 1993.

El monumento incluye accesos para que los visitantes puedan descender a un nivel subterráneo y contemplar más de cerca parte de la pared original que limita el World Trade Center y que quedó al descubierto después de las tareas de desescombro.

Un museo dedicado a evocar la tragedia y a honrar a las víctimas se ubicará también en ese nivel subterráneo y próximo a donde estuvo la Torre Sur, la segunda en ser atacada y la primera en caer.

En el extremo opuesto del recinto y cercano a la Torre Norte se creará un espacio para actividades culturales.

Los autores del proyecto han previsto que numerosas objetos recuperados en el lugar de la tragedia puedan ser expuestos al público en ese nivel, así como que los visitantes tengan posibilidad de desplazarse por él y disponer de lugares en los que recordar y expresar su homenaje a las víctimas.

En el espacio donde se ubicaba la Torre Norte habrá un mausoleo en el que reposarán los restos no identificados de algunas víctimas de la tragedia del 11 de septiembre.

Los dos amplios estanques formarán parte de una amplia plaza con gran cantidad de arboles y con la que los autores han pretendido crear un elemento exterior que evoque cierta paz y vida a la vez.

«Hoy presentamos la pieza más importante del plan para un nuevo World Trade Center», señaló John Whitehead, presidente de la Corporación para el Desarrollo del Bajo Manhattan, entidad que dirige el proceso de reconstrucción de la zona y que convocó el concurso internacional para el memorial.

«Con este diseño sentimos el vacío, en nuestra mirada y en nuestros corazones, pero a la vez garantizamos que ese vacío nunca será olvidado», agregó, en alusión al carácter evocador y de persistencia en el tiempo que han querido dar al espacio.

Publicaciones Relacionadas