La sociedad dominicana debe involucrarse en la discusión sobre la reforma constitucional, pues en lo adelante  el tema se convertirá en un escenario de trascendencia en que todos los actores socialmente relevantes están convocados a plantear sus voces.

El planteamiento lo hizo ayer el vicepresidente ejecutivo de la Fundación Institucionalidad y Justicia, (Finjus), doctor Servio Tulio Castaños Guzmán.

Mientras, el jurista Eduardo Jorge Prats consideró que sería un error político que el Partido Revolucionario Dominicano (PRD) se abstenga de una discusión que será importante para el fortalecimiento participativo de los dominicanos.

Sin embargo, la reelección presidencial es a su juicio el punto de mayor entretenimiento en cuanto al contenido de la reforma y amenaza con neutralizar las discusiones sobre aspectos más sustanciales.

Ese aspecto conforma una sombra que preocupa sobremanera a las organizaciones sociales y comunitarias en todo el país, dijo. “Entendemos de vital importancia que la discusión y búsqueda de consenso político de un tema de esta envergadura sea dejado para el final del proceso, para que el debate sobre otros temas más importantes que le anteceden en el tiempo sea más fructífero, evitando el desgaste en discusiones menos provechosas para la nación dominicana”, dijo Castaños Guzmán.

A su juicio, el que la Asamblea Revisora tenga la competencia constitucionalmente reconocida al día de hoy para instrumentar la última fase de la reforma, no puede ser obstáculo para que sectores sociales queden excluidos o se auto excluyan.

“Todas las voces tienen que ser escuchadas, porque la Constitución es de todas y de todos”, señaló el vicepesidente ejecutivo de la  Finjus.

Se trata de una reforma profunda, si es que se quiere ser consecuente con el proceso de consulta .