Wall Street cerró hoy en rojo y el Dow Jones de Industriales, su principal indicador, retrocedió un 0,86 %, acabando la semana en negativo y deteniendo, al menos por ahora, el “rally” veraniego que se ha registrado en los mercados.

Al término de las operaciones en la Bolsa de Nueva York, el Dow Jones perdió 292,30 puntos hasta 33.706,74, lo que supone una bajada semanal del 0,2 %.

El selectivo S&P 500 se dejó un 1,29 % o 55,26 enteros, hasta 4.228,48, mientras que el índice compuesto del mercado Nasdaq bajó un 2,01 % o 260,13 unidades, hasta 12.705,22.

Con bajadas semanales del 1,2 % y del 2,6 % respectivamente, esos dos indicadores pusieron fin a cuatro semanas seguidas de ganancias en las que habían recuperado parte del terreno perdido en la primera mitad del año, aunque ambos siguen muy lejos de los niveles en los que terminaron 2021.

Según los analistas, lo que más pesó estos días fue la perspectiva de que la Reserva Federal (Fed) pueda continuar con agresividad su política de subidas de los tipos de interés para combatir la inflación.

La publicación de las actas de la última reunión de la Fed y las declaraciones de algunos de sus miembros han venido a echar por tierra las esperanzas de algunos inversores, que confiaban en que el banco central estadounidense optaría por moderar las alzas para no enfriar demasiado la economía.

Aunque en las actas dadas a conocer esta semana se apunta la necesidad de evaluar el impacto que la subida del precio del dinero está teniendo, la Fed también deja claro que los tipos van a seguir subiendo a corto plazo.

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Ahora está por ver si esta semana es sólo una pausa o si supone definitivamente el fin de la recuperación que se había visto en Wall Street.

La bajada de estos días ha sido especialmente clara para los sectores que, como el tecnológico y otros considerados de riesgo, habían rebotado con más fuerza desde los mínimos anuales que tocaron en junio.

“Hemos visto una sólida recuperación de activos de riesgo recientemente y quizás estemos viendo señales de agotamiento”, señaló hoy en una nota el analista Craig Erlam, de la firma Oanda.

Según Erlam, las recientes subidas en el mercado se han basado principalmente en algunas señales que apuntan a que la inflación se está frenando, pero también a “una sana dosis de esperanza».

“Sigue habiendo abundante escepticismo y ahora los datos tienen que cumplir”, señaló el experto, que cree que los inversores están esperando por algún “catalizador” que pueda “cambiar la dinámica en los mercados».

Hoy, las mayores pérdidas fueron para las empresas de bienes no esenciales (-2,1 %), las financieras (-2,02 %) y las tecnológicas (-1,83 %), mientras que sólo las energéticas (-0,02 %) y las sanitarias (0,27 %) acabaron en verde.

Entre los treinta valores del Dow Jones, destacaron las bajadas de Boeing (-3,42 %), JPMorgan Chase (-2,47 %) y Nike (-2,46 %). Las mejor paradas fueron Johnson & Johnson (1,52 %), MSD (0,74 %) y UnitedHealth (0,57 %).

En el mercado petrolero, el precio del barril de referencia en Estados Unidos acumuló hoy su tercer día seguido al alza, lo que no fue suficiente para compensar los claros descensos del lunes y el martes y dejó la cotización con un retroceso semanal del 1,43 %, hasta 90,77 dólares.

En otros mercados, al cierre bursátil el oro bajaba hasta 1.760,8 dólares la onza, la rentabilidad del bono estadounidense a 10 años subía al 2,979 % y el dólar ganaba terreno frente al euro, con un cambio de 1004.