Dueños de gimnasio revelan que el sector vive una situación de crisis con quiebras de negocios y pérdidas de empleos tras estar cerrados desde el 18 de marzo hasta el primero de julio y desde el pasado martes volver a cerrar ante la declaración de estado de emergencia tras el aumento de casos por Coronavirus.
Resaltaron que en estos momentos donde la salud de las personas es la prioridad son un sector que promueve la actividad física y las prácticas saludables.
Dueños de estos negocios consultados por HOY coincidieron en señalar que se han preparado para tener en sus establecimientos las medidas sanitarias necesarias y acorde a estándares internacionales, así como compra de equipos costosos para evitar contagios de COVID-19 y que sus clientes se puedan ejercitar de forma segura. Así mismo han reducido la cantidad de clientes por horas.
También cuestionan que se haga un cierre de manera generalizada sin antes visitar los centros para inspeccionar si cumplen o no con las medidas de higiene.
La directora general de Club Body Shop, Leslie Torres, resaltó que esta nueva disposición del Estado ha sido tomada de manera unilateral, sin diálogo alguno con los representantes de la industria y sin tomar en cuenta el impacto financiero, fiscal y laboral de esta crisis sobre los Centros de Deportes y Bienestar.
“Este nuevo cierre obligatorio pone a nuestro sector en una posición muy difícil, nos lleva a tocar fondo. No hemos recibido concesiones especiales como otras industrias afectadas. La falta de plazos claros y de diálogo nos plantea un escenario sombrío para el sector”, expresó. Agregó que antes de la pandemia tenía 325 empleados fijos en sus cinco sucursales y ahora tras tres meses sin operar, tras la disminución esperada en socios activos y los cambios en el modelo de operación, ahora cuentan con 219 empleados.
Mientras Paul Vargas, dueños del gimnasio Bioemotion, en Arroyo Hondo, expresó que son parte de la solución, no del problema con el COVID-19. Dijo que de acuerdo con estudios internacionales, sí se puede entrenar con mascarillas, pero se recomienda la quirúrgica.
Mientras Manelich Salazar, de Mango Crossfit, expresó que el sector vive haciendo malabares para sobrevivir y muchos de sus clientes ahora han pasado a modalidad en línea.