Este crecimiento, según el estudio presentado en el Foro Asonahores de Inversión Turística, representa un 23% de tasa promedio de crecimiento en los últimos cinco años
En cinco años el número de alojamientos no hoteleros se ha duplicado en República Dominicana, pasando de 19,809 en diciembre de 2018 a 39,943 en el mismo periodo de 2022, o sea que en ese período ha sumado 20,134 hospedajes de estadía corta rentadas desde plataformas digitales.
La mayor cantidad de estos Airbnb están localizados en la provincia de Puerto Plata con un 18% del total, de acuerdo al estudio Impacto del Turismo en la República Dominicana, seguido por La Altagracia, con un 17% y Santo Domingo que tiene un 11% de los alojamientos.
Para el año 2018 Puerto Plata tenía el 25 por ciento del los alojamientos.
Este crecimiento, cita el estudio presentado en el Foro Asonahores de Inversión Turística, representa un 23% de tasa promedio de crecimiento en los últimos cinco años.
Agrega que el año 2022 fue el de mayor crecimiento interanual al compararse con el año 2021.
A nivel regional, la investigación precisa que el año pasado la República Dominicana superó a México en oferta habitacional de alojamiento de corto plazo en el Caribe.
Este crecimiento continúa aún sin regulación, a pesar de que el Gobierno ha dicho que se estaba trabajando para regular este sector e incluso se indicó una fecha.
Hace unos meses el fundador de Grupo Puntacana, Frank Rainieri, reiteró su preocupación a la tardanza de las autoridades pertinentes para regular las plataformas digitales dedicadas a la oferta de alojamientos a particulares y turísticos, como el Airbnb, principalmente en la zona Este.
“A mí no me preocupa el crecimiento desmedido que ha tenido; me preocupa que no esté regulado y reglamentada porque toda actividad de lícito comercio debe tener el derecho a ejercerse, pero debe estar regulado y que sea acorde con las necesidades de la zona y del país”, dijo Rainieri.
Según la viceministra de Turismo Jacquelin Mora, se ha avanzado en la regulación.
Dijo que para el próximo año, debido a las revisiones que se han hecho, ya debe salir una primera parte de la regulación, para ir conociendo el sector.
“Yo creo que para el 2024 ya debe haber una primera parte. Tiene que haber una regulación de esos alojamientos sin lacerar la parte regulatoria”, explicó.
Se recuerda que la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) elaboró una norma con la que pretende aplicar impuestos a las operaciones de ventas de bienes y servicios que se realizan por la vía digital, lo cual incluiría las rentas por Airbnb.