DUBÁI. El ministro de Relaciones Exteriores de Emiratos Árabes Unidos aseguró el sábado que los países árabes que están aislando a Catar no buscan un “cambio de régimen” en ese país, sino un “cambio de conducta”. Sin embargo, el ministro Anwar Gargash dijo a periodistas en Dubái que su país y sus aliados Arabia Saudí, Egipto y Bahrein están dispuestos a cortar sus lazos con Catar si no cumple sus demandas.
Los cuatro países presentaron el jueves a Catar una lista de 13 demandas a través de Kuwait, que actúa como mediador, y le dieron 10 días para que los cumpla. Catar ha dicho que está revisando el ultimátum, que incluye demandas como cerrar el canal de televisión árabe Al Jazeera, cortar lazos con grupos islamistas como la Hermandad Musulmana y moderar sus relaciones con Irán.
Los vecinos de Catar insisten en que la lista de demandas es final y que no es un punto de partida para negociaciar. Los países árabes advirtieron que si Catar no las cumple antes del plazo, seguirán restringiendo indefinidamente su acceso a rutas terrestres, marítimas y aéreas en medio de la creciente presión económica sobre la nación del Golfo Pérsico.
Las demandas de los vecinos de Catar equivalen a obligarla a que revise por completo su política exterior y que deje de usar el tráfico de influencias en la región financiado con su gas natural.
En caso de cumplir, Catar pondría sus políticas en línea con la visión regional de Arabia Saudí, la mayor economía del Medio Oriente y el único país con el que Catar tiene frontera terrestre.
Los cuatro estados árabes cortaron lazos con Catar luego de acusarla de financiar el terrorismo. El gobierno en Doha rechaza la acusación pero de la que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se ha hecho eco. La medida ha dejado a Catar bajo un bloqueo de facto por parte de sus vecinos.