Hoy 
La falta de educación, el consumo excesivo de alcohol y otras drogas y la agresividad se pusieron en evidencia en las primeras horas de la madrugada y la mañana de ayer en los principales hospitales del Gran Santo Domingo y provincias.
El director nacional de Emergencias y Desastres de Salud Pública, doctor Séntola Martínez, estuvo desde la madrugada en los centros de Salud de Santo Domingo y asegura que el 74% de los heridos por armas blancas eran jóvenes y varones entre 18 y 30 años de edad.
La emergencia del hospital Darío Contreras era todo un pandemonio, a primeras horas de la mañana de ayer: jóvenes ebrios, sin camisas, pantalones por debajo de los glúteos, heridos de armas blancas buscaban atención y tanto ellos como sus familiares se mostraban desafiantes.
En el Darío Contreras el número de casos se elevaba conforme pasaban las primeras horas, la emergencia se llenaba, pero la mayoría eran heridas de armas blancas que se resolvían en el área, sin tener que internarlos, aseguró el doctor Héctor Maceo Quezada, director del centro.
En este hospital se registraron, sin el incremento del día de ayer 140 pacientes heridos y tres defunciones. De las tres defunciones, dos corresponden a personas que llegaron muertas a la emergencia.
Solo se habían ingresado hasta el mediodía 40 personas y no había hasta ese momento heridos por armas de fuego, dijo Quezada.
El 24 fue un día normal, aseguran Martínez y Quezada, pero al llegar la madrugada y mañana del 25 comenzaron a exacerbarse los casos y a llegar las personas ebrias y heridas.
En los hospitales Luis Eduardo Aybar y Francisco Moscoso Puello, los heridos e intoxicados por alcohol y alimentos también se evidenciaron.
En la mañana de ayer, el hospital Moscoso Puello registró 16 heridos de armas blancas y había un mayor número de intoxicaciones alcohólicas.
Salud Pública tenía contabilizados ocho muertos a media mañana de ayer, mientras los organismos de socorro registraban un número menor.
En el hospital San Vicente de Paúl, de San Francisco de Macorís, la situación era casi normal, dijo el director del centro. No se habían reportado heridos en cantidad significativa.
El hospital Robert Reid Cabral, principal centro infantil de Santo Domingo, no había recibido niños intoxicados.
En el hospital Juan Bosch, de El Pino, La Vega, hubo 64 emergencias.
