ROMA (EFE).- El Tribunal de Apelaciones de Bolonia (norte de Italia) condenó ayer a treinta años de prisión a la dominicana Mercedes Rosario Díaz Rodríguez, al considerarla culpable del asesinato, el año pasado, de su suegra y de un hombre de 75 años.

La pena se ajustó a la solicitada por el fiscal Flavio Lazzarini, quien mostró su satisfacción «porque esta sentencia devuelve la serenidad a los familiares» de las víctimas, que deberán además ser indemnizados con 50.000 euros, según el fallo judicial.

Mercedes Rosario, de 33 años, fue condenada por el asesinato de su suegra, Cesarina Lelli Tedeschi, de 84 años, y de Giuseppe Casarini, de 75, un italiano con el que aparentemente había mantenido una relación sentimental.

Durante el proceso la acusada ofreció testimonios confusos y aseguró en varias ocasiones no acordarse de lo sucedido los días 23 y 24 de abril del año pasado, cuando los homicidios tuvieron lugar.

En la reconstrucción final de los hechos afirmó que un brujo dominicano había predicho las muertes, al tiempo que reconoció que golpeó a Casarini en su vivienda con una pistola antigua porque éste le instó a mantener relaciones sexuales.

La suegra de la procesada fue asesinada de varios golpes un día después de la muerte de Casarini, pero la acusada aseguró en todo momento que la anciana falleció a causa de una caída.

El fiscal, en cambio, indicó que Rosario Díaz cometió ambos crímenes con una crueldad inusitada, golpeando al hombre hasta romperle la caja torácica y propinando también numerosos golpes en la cabeza y el tórax a la anciana.

A pesar de las declaraciones confusas de la procesada, la acusación aseguró que el comportamiento que mantuvo después de los asesinatos fue totalmente racional.