Ecología

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 POR DOMINGO ABREU COLLADO
Hotspots: el libro de CEMEX (1 de 3)

La primera idea que nos llega a la cabeza al sumergirnos en “Biodiversidad Amenazada II” es una interrogante: ¿qué ocurriría con el planeta si todas las empresas, el mundo empresarial, y en beneficio del mundo real, decidieran asumir la actitud adoptada por Cemex?

No hay duda de que la especie más amenazante es la especie humana. Es más, es la responsable de que la biodiversidad en todo el planeta se encuentre amenazada. Y ha sido su asombrosa capacidad para transformar la materia, generar energía y adecuar microclimáticamente las zonas que elige para vivir, la causa de los grandes estragos ecológicos producidos donde quiera que se ha establecido a vivir.

Pero en realidad, no han sido los pequeños grupos humanos desprovistos de alta tecnología quienes cargan con la responsabilidad de lo que ocurre con el planeta. Éstos cargan con sólo una parte de esa responsabilidad. Los mayores responsables han sido aquellas grandes empresas y corporaciones, que asumiendo el rol de líderes del desarrollo y de la industrialización del mundo han estado utilizando los recursos más voraces para transformar la materia natural en artefactos de alto consumo de energía, tanto en su producción como en su función.

Esa transformación, iniciada con la utilización (sin reemplazo) de los bosques, dejó a la mayoría de las especies terrestres conocidas sin hábitat. Y en el mar, si bien no lo ha desecado, ha causado la mayor hecatombe contaminante en perjuicio de miles de grandes y pequeñas especies.

De igual manera, la industrialización de la alimentación, aprovechando la insustituibilidad de la obligación de satisfacer la natural demanda de nutrientes de los seres humanos, ha transformado los campos de alimentos que fueron de regeneración espontánea en áreas letales para miles de especies, a la vez que sustituyó los alimentos naturales por productos artificiales (transgénicos) de los cuales no se tiene certeza sobre su beneficio o perjuicio para los consumidores.

Haber sustituido la capacidad colectiva de producción de los grupos humanos por industrias especializadas, no sólo ha hecho disminuir las capacidades naturales físicas e inteligentes de los seres humanos, sino que les ha hecho caer en una trampa biológica, genética, de autodestrucción por eliminación de la base de recursos naturales que le permitieron llegar como especie hasta donde está.

Con una superficie terrestre desolada, con una atmósfera contaminada y con un mar envenenado ¿a dónde irá la especie humana y las demás especies que constituyen la biodiversidad del planeta? Ya una buena parte de esa biodiversidad desapareció para siempre.

“Hotspots: biodiversidad amenazada II” no es solamente un magnífico libro. Es una voz clamando en el planeta para que la industria se autoanalice introspectiva y retrospectivamente. Es la voz autocrítica de CEMEX por un planeta que debe vivir.

La opinión de Harrison Ford

Harrison Ford, el famoso Indiana Jones del cine, no es solamente un buen actor, sino también un activista por la conservación de la naturaleza en el mundo. Miembro de la directiva de la organización “Conservación Internacional”, escribió el prólogo del libro “Hotspots” II publicado por Cemex y como no tiene el menor desperdicio nos permitimos incluirla en esta primera de tres partes sobre “Hotspots”: biodiversidad amenazada II”.

“Hace cinco años mis colegas de Conservation International me pidieron que escribiera el prólogo para “Biodiversidad amenazada, las ecorregiones terrestres prioritarias del mundo”, una ambiciosa evaluación de la biodiversidad en riesgo del planeta. Aunque he tenido el honor y el privilegio de formar parte de la Junta Directiva de Conservation International durante los últimos doce años, estaba renuente a aceptar dicha tarea. No soy biólogo ni experto en estrategias globales para salvaguardar las especies amenazadas y los hábitats que se están perdiendo. Pero estoy profundamente preocupado por el futuro de nuestro planeta.

“Es evidente que cualquier esfuerzo por atender estos complicados asuntos demandaría el entendimiento científico más completo y escrupuloso. Como parte del análisis inicial, los principales ambientes terrestres del mundo fueron inventariados y 25 de ellos sobresalen por su excepcional endemismo, por estar gravemente amenazados y por necesitar atención inmediata para su conservación. Algunas de estas regiones fueron consideradas como prioridades obvias desde el principio. Otras nos sorprendieron al analizar los datos.

Las reacciones al primer libro

“El libro original “Biodiversidad amenazada, las ecorregiones terrestres prioritarias del mundo” tuvo un impacto asombroso -continua exponiendo el actor y ecologista Harrison Ford-. La BBC Wildlife Magazine, durante la celebración de su cuadragésimo aniversario, lo declaró como uno de los 40 títulos clásicos principales sobre la vida silvestre publicados en los últimos cuatro decenios. Poco tiempo después de su publicación, el Banco Mundial, el Global Environment Facility, la McArthur Foundation y el gobierno del Japón se unieron a Conservation International para crear el Critical Ecosistem Partnership Fund, y hasta han comprometido 125 millones de dólares especialmente para la conservación de las ecorregiones terrestres prioritarias (ETP o “hotspots”) del mundo. Mientras tanto, un número cada vez más grande de instituciones siguen incorporando los resultados dentro de sus programas. Quizá igualmente importante, el análisis de las ETP ha desencadenado fuertes debates acerca de dónde deben gastase esos valiosos recursos para lograr el mayor impacto en el futuro. El estudio se centró en un problema en particular -conservar la biodiversidad- y posteriormente, de manera sistemática, se realizaron mediciones, evaluaciones y se asignaron prioridades. Hay quien podría argumentar que sería mejor enfocarse en problemas de carácter global, como el control de la natalidad, la pobreza, las enfermedades, el uso de energía no sustentable o la contaminación atmosférica. Sin duda, estos asuntos son definitivamente críticos a largo plazo para la calidad de vida en el planeta. Sin embargo, en la carrera por venir, la extinción de grandes porciones de herencia viva de la Tierra, nada hace avanzar nuestro conocimiento y dirige nuestras acciones de manera tan adecuada como el modelo de los “hotspots”.

El “hotspots” como herramienta de estudio

Finalmente, el prólogo de Harrison Ford destaca lo siguiente. “Es por ello que este estudio actualizado es tan importante y por lo cual se ha vuelto un elemento esencia de la caja de herramientas de los conservacionistas en tan poco tiempo. Los expertos han agregado varias regiones nuevas a una lista sustancial de prioridades globales. Estas nuevas ETP van desde los bosques de pino-encino de México y el suroeste de Estados Unidos hasta el Cuerno de Africa, desde el Himalaya hasta Japón. Algunas de estas regiones, como las islas Salomón y Vanuatu, que conforman la nueva ETP de las islas melanesias orientales, no figuraban en la lista original de las ETP debido a que sus hábitats se encontraban aún intactos en su mayor parte. En ese entonces no se consideraban amenazadas. Sin embargo, en un abrir y cerrar de ojos, su condición se deterioró de manera esencial y pasó de ser más o menos estable a crítica.

“El reto más significativo de nuestro tiempo es conservar y proteger nuestro legado biótico. La misión de Conservation International de defender los sitios con biodiversidad ha colocado a sus equipos de colaboradores en unos cuarenta países alrededor del mundo, en asociación con una variedad sorprendente de instituciones e individuos de diversas formaciones y culturas. Las estrategias que han empleado están fundamentadas en ciencia sólida e independiente. Asimismo, han desarrollado una amplia experiencia para determinar la mejor manera de responder ante situaciones de crisis y, al mismo tiempo planear el futuro con pasos cada vez más grandes.

“Le deseo una buena lectura y espero que este libro amplíe su perspectiva y comprensión del reto que implica conservar el mundo natural.”

HARRISON FORD

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