Conforme a su informe preliminar referente a la economía dominicana, el Banco Central afirmó que el crecimiento del 2010 representó un 7.0% y para este 2011 el FMI augura un 5.5%, indicativos ambos de una economía robusta en medio de una vorágine especulativa de los comodities que flage a la humanidad.

La tasa de desocupación al cierre del 2010 se situó en un 14.1% idéntico a los resultados previo la crisis planetaria 2008-09.

El crecimiento del año pasado superó los estimados del FMI y sus factores troncales siguen siendo turismo, zonas francas recuperadas, remesas, comunicaciones y sobreabundancia de productos agropecuarios.

En 2010 fueron posible crear 160,208 puestos de trabajo para un total desde 2004 en que el presidente Leonel Fernández asumió su segundo mandato constitucional totalizaron 589,003 nuevos empleos que no es un récord, pero sí un average apreciable.

La construcción creció en 2010 un 10.1%, comercio 12.1%, bancos y seguros 11.3%, comunicaciones 8.4%, hoteles, bares y restaurantes 7.0%, agropecuario 5.6%, energía y agua 6.4%, rentas viviendas que deben pasar sus depósitos al Banco Agrícola un 3.1%, administración pública 1.2%, educación 5.9%, salud 4.6% y un complemento vario un 4.3%.

Temo Montás afirma que la pobreza se ha reducido 10.2% en los últimos seis años al reducir de 43.4% en octubre 2004 a 33.2% en abril 2010.

El gobernador del Banco Central, Héctor Valdéz Albizu, dispone de un ingrediente señero en esta jornada de recuperación económica sólo con equilibrar la prima del dólar en estos dos mandatos del presidente Leonel por debajo del 38×1.

Esa pequeña gran referencia que con coherencia recorre la aldea global por seis años resulta el soporte de la confianza en la inversión tanto nativa como foránea que debe ser asimilado por los compañeros de la base de la acera frontal.