LUIS VARGAS
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Inseguridad de las Aseguradoras
El reciente lanzamiento del plan de rescate a favor de las aseguradoras de bonos municipales y corporativos o “monolines”, por parte de la Superintendencia de Seguros de New York, constituye una errada operación de contención a la profundización de la crisis económica y financiera que vapulea Estados Unidos y el mundo.

El derrumbe de las corporaciones de seguro de obligaciones ha consistido en la caída estrepitosa de las cotizaciones de las acciones bursátiles en el último año, así como el registro de cuantiosas amortizaciones y asunción de pérdidas en las hojas del balance del cuarto trimestre de 2007.

Del 2 de febrero de 2007 al 4 de febrero de 2008, los valores de las acciones de MBIA y Ambac, las dos principales compañías del mercado asegurador, se han desplomado respectivamente 78,40%, de US$70,60 a US$15,25, y 85,79%, de US$87,25 a US$12,40; mientras que de octubre a diciembre del pasado 2007, ambas declararon podas contables de los títulos por 3 mil 500 y 5 mil 210 millardos (miles de millones) de dólares y pérdidas por 2 mil 300 y 3 mil 260 millardos.

Se estima que la desvalorización de los bonos asegurados alcanza en la actualidad más de 200 millardos de dólares, a causa del colapso de los mercados de los títulos respaldados por activos e hipotecas, desatado por las incontenibles alzas de las tasas de mora e impagas de deuda, y el continuo desbarranque de los bonos emitidos por los municipios, empujado por los crecientes déficits de las cuentas fiscales. Los negocios aseguradores apenas cuentan con insuficientes 22 millardos de dólares en capital para cubrir cualquier pérdida resultante de cesaciones de pagas de  valores de bonos calculados en cerca de 2 mil 400 millardos.