La economía de la República Dominicana cerrará este año con un crecimiento de 7.5%, una inflación controlada, una tasa de cambio relativamente estable y un incremento en 20% de las exportaciones respecto a las del 2009, informó la noche del jueves el Ministro de Economía, Planificación y Desarrollo.

El ingeniero Temístocles Montás dijo que ese balance da la tónica global de una dinamización económico en el año que concluye.

Explicó que ese resultado se ha producido en un contexto en el cual hubo primero una política fiscal y monetaria expansiva y, después, una política de consolidación fiscal para terminar el periodo con un déficit fiscal de 2.4% del producto interno bruto, inferior al 3.5% del año anterior, y una proyección de reducirlo a 1.6% en el nuevo año, conforme a los acuerdos con el FMI.

Montás explicó que mediante el mismo acuerdo con el Fondo Monetario, esa combinación de política fiscal y monetaria expansiva aplicada al principio para producir la dinamización económica que se registra, estuvo acompañada de una política de consolidación fiscal que hoy garantiza la sostenibilidad fiscal del país.

El funcionario se expresó en estos términos al intervenir en un debate económico auspiciado por el espacio Uno más Uno, de Teleantillas, canal 2, conducido por el periodista Juan Bolívar Díaz y en el que intervinieron los economistas Bernardo Vega, José Luis de Ramón y Miguel Ceara Hatton.

Montás pronosticó un déficit en cuenta corriente de 7.5% del PIB, superior al previsto, financiado en algunos casos con recursos que ingresan a la economía y, en otros, con las reservas internacionales del Banco Central, en coordinación con el organismo crediticio internacional.

El ministro adelantó que aunque se proyecta un crecimiento de 6% el próximo año y un contexto de inflación inferior al 6%, la economía estará signada por lo que ocurra en los Estados unidos y en Europa.

Fundamentó sus pronósticos en que el año próximo las exportaciones deberán crecer en alrededor de un 9% con la reanudación de las actividades mineras de la Falconbridge, en febrero, el inicio de la producción de oro por la Barrick Gold a final de 2011.

“Estos elementos ayudarán y tendrán un gran impacto incluso en el 2012, lo que contribuirá a una atenuación del déficit en la cuenta corriente”, indicó, y agregó que las expectativas son de que el país tendrá un buen año 2011.

Esa proyección, dijo, está sustentada en un precio en el barril de petróleo de US$80, dependiendo de que no ocurra una devaluación del dólar que lo incremente más, y a que la economía estadounidense no se desplome o tenga un crecimiento poco aceptable.

Con relación a la Propuesta Estrategia Nacional de Desarrollo anunció que este febrero próximo podría ser sometida al Poder Legislativo para su conversión en Ley, pues en enero próximo estarían consolidadas las sugerencias empresariales, laborales y de las ONG que llevaron a cabo un gran proceso de consulta territorial.

Montás informó que incluso el Ministerio está en consulta con el asesor francés Jacques Attalí contratado para adaptar la Estrategia, para que sea creada la comisión que deberá poner en marcha sus recomendaciones.

El ministro compartió la necesidad planteada por diversos sectores de cambiar el modelo económico vigente que protagonizan los sectores consumidores de dólares y hacerlo descansar en los que generan los dólares.

Recordó que uno de los problemas fundamentales de ese modelo se expresa en el desequilibrio en  la cuenta corriente del país.

Montás citó que en los últimos años el 75% del crecimiento económico del país ha descansado en esos sectores consumidores de divisas, tales como las telecomunicaciones, la construcción, el comercio y la intermediación financiera.

El funcionario manifestó su optimismo de que ese cambio es posible, porque lo mismo se pudo en los decenios de los setentas y ochentas, cuando del modelo agropecuario de exportación de café, cacao, azúcar y tabaco se pasó al actual de servicios, turismo y zonas francas.

Aunque para lograrlo, dijo, se requerirá de tiempo, proclamó que el país está en buen momento para dar ese salto, para aprovechar por ejemplo sus tratados comerciales con Estados Unidos y la Unión Europea, que requerirán de políticas que transfieran a los sectores generadores de divisas el protagonismo de impulsar la economía.

Sobre sostenibilidad económica y endeudamiento, llamó la atención sobre cómo abordar estos asuntos que miden la capacidad del Estado, debido a que no puede ser prerrequisito generar 2 o 2.5% de superávit primario.

“Eso va a depender de la dinámica económica, pues no el porcentaje de superávit primario dependerá de cómo se mueva la economía y, de acuerdo con el FMI, obliga al Gobierno a reducir de manera significativa su déficit fiscal..

“Terminamos el año con un déficit fiscal de 2.4% del PIB, y el compromiso para el año que viene es terminar con 1.6%, un ajuste de casi un uno por ciento del PIB, ajustando el presupuesto de manera tal que para el próximo año el déficit caiga casi en uno por ciento”, comentó.

Agregó que en el 2012 la idea es que el déficit fiscal sea 2.6% del PIB, para lo cual ajustarán de nuevo el presupuesto para 2012 en casi 1% más del PIB, 22 a 23 mil millones.

Dijo que se trata de un compromiso de conducir las finanzas públicas en las líneas de la sostenibilidad fiscal que, dijo, es lo que importan, pues desde que para 2012 se tenga un déficit de 0.6% del PIB, se estará generando superávit primario.