De los Servicios de Hoy. Washington. La economía estadounidense sigue creando empleos por encima de las previsiones.  Según los datos publicados ayer  por el Departamento de Trabajo, en febrero se crearon 227,000 puestos de trabajo, más de lo esperado, y también se han revisado fuertemente al alza las contrataciones de los meses anteriores. 

La tasa de desempleo, por su parte, se mantuvo sin cambios en el 8.3%, casi en mínimos de los últimos tres años. La creación de empleos de los últimos seis meses (1.2 millones de trabajos) es la mejor racha que vive el país desde 2006.

Destaca asimismo la revisión de los dos meses anteriores: en enero se crearon 284,000 empleos, 43,000 empleos más de lo publicado anteriormente, y en diciembre finalmente hubo 223,000 trabajadores nuevos, frente a los 203,000 anteriores. En total, en estos dos meses se crearon 61,000 empleos más de lo publicado.

Estos datos llegan justo una semana antes de la reunión de la Reserva Federal, y esta fortaleza del mercado laboral pone en duda que la institución dirigida por Ben S. Bernanke vaya a lanzar nuevos estímulos, el denominada QE3 (más compras de activos), ya que además podría disparar la inflación.

Más señales positivas.  Otros datos que no habían acompañado los anteriores  de empleo sí que empiezan a apoyar también la recuperación: el total de la fuerza laboral creció en 476,000 personas, es decir, hay más gente en el mercado.

En este sentido, la tasa de participación, que indica el porcentaje de gente en edad de trabajar que está en la fuerza laboral, se incrementó en dos décimas al pasar del 63.7% al 63.9%.

Además, todos los empleos provinieron del sector privado, que creó 233,000 empleos, mientras que el sector público destruyó 6,000 empleos. Además, se revisó al alza el dato de enero hasta los 285,000 empleos privados.   La denominada tasa U-6, seguida por muchos analistas como más orientativa y más real, cayó dos décimas, del 15.1% a 14.9%. En este apartado se incluyen aquellos que han dejado de buscar trabajo, los denominados «desanimados»; que han aceptado un puesto a tiempo parcial pero quieren uno a tiempo completo o que han buscado trabajo en algún momento en los últimos doce meses.

Mucho camino por recorrer. A pesar de estas mejoras, EEUU sigue en su recesión laboral más larga desde la Gran Depresión, ya que se acumulan 49 meses desde que alcanzó su pico de empleo en enero de 2008. Y teniendo en cuenta que todavía debería crear 5.33 millones de empleos para llegar de nuevo a él, esta situación se va a mantener durante varios años más. En 2011, por ejemplo, se crearon 1.82 millones de empleos.   Esta recesión laboral coincide con la peor recuperación de la economía que se recuerda: el PIB de EEUU no ha crecido por encima del 4% desde el primer trimestre de 2006, el peor dato desde al menos 1950. 

El único periodo comparable fue el comprendido entre finales de 2000 y mediados de 2003, en plena burbuja tecnológica, si bien el desempleo nunca superó el 6.3%.  

Las claves

1.  Comparación positiva

 La creación de empleos de los últimos seis meses (1.2 millones de trabajos) es la mejor racha que vive el país desde 2006.

2.  Crecimiento

En enero se crearon 284,000 empleos, 43,000 empleos más de lo publicado anteriormente, y en diciembre finalmente hubo 223,000 trabajadores nuevos.