[b]Señor director:[/b]

Para cualquier gobierno del mundo lo más importante desde el punto de vista de la ejecución de una política económica correcta es la consecución de una serie de objetivos puntuales que permitan un crecimiento sostenido del Producto Bruto Interno (PBI), una estabilidad macroeconómica que garantice un flujo permanente de inversión extranjera, una estabilidad de precios, reducción de los niveles de inflación y control de la tasa de cambio para evitar la depresión creciente de la moneda nacional.

De lograrse esos objetivos, la economía de ese país alcanzaría niveles de crecimiento sostenido que redundarían en la elevación de los niveles de vida de la población, en el incremento de su capacidad de consumo y por lo tanto de su bienestar, y en términos de mediano plazo ese proceso de crecimiento se traduciría a niveles de desarrollo integral de esa economía y de esa nación.

Los grandes tratadistas de los problemas económicos afirman que una economía marcha bien cuando alcanza un crecimiento anual promedio de un 4% y una tasa de inflación de menos de dos dígitos, es decir, por debajo de un 10%. Durante los cuatro años del período gobernado por el doctor Leonel Fernández, 1996-2000, la economía dominicana se mantuvo creciendo de manera sostenida pro encima de un 7% y los niveles de inflación nunca superaron el 8%. De eso se deduce que el actual gobierno de Hipólito Mejía y el PPH encontró una economía sana, en crecimiento, con niveles de inflación controlados y con amplias perspectivas de seguir la espiral del desarrollo.

Sin embargo, fruto de los desaciertos y de las erradas políticas llevadas a cabo por el actual gobierno, la economía dominicana se encuentra hoy en una de las más graves y profundas crisis de toda su historia. En estos casi cuatro años en que el presidente Hipólito Mejía y su equipo gobernante ha dirigido la economía, la situación del país se ha convertido en un verdadero desastre. Todos los indicadores económicos se han caído de manera estrepitosa, el proceso de crecimiento económico que se había logrado en cuatro años de manera consecutiva ha retrocedido a niveles negativos, lo niveles de inflación han alcanzado cifras récords, se han perdido más de 700 mil empleos, la devaluación de la moneda dominicana ha sido sorprendente y la crisis económica ha alcanzado una magnitud tal que nos encontramos en un verdadero caos económico y social.

En el aspecto económico el gobierno de Hipólito Mejía y el PPH ha sido un verdadero desastre. Un cúmulo de desaciertos, improvisaciones e incoherencias de principio a fin. La Biblia expresa que «por sus frutos los conoceréis» y los frutos del actual gobierno demuestran con creces que su ejercicio económico ha sido un verdadero, total y absoluto fracaso. Para muestra varios botones:

-El crecimiento del Producto Bruto Interno (PBI), es decir, la cantidad de bienes y servicios que produce la economía dominicana en un año, fue negativo en el 2003 y se perfila que también será negativo en el 2004. Esto significa que nuestra capacidad productiva como nación se ha deteriorado por el mal manejo económico de las autoridades gubernamentales.

-La tasa de cambio se incrementó en más de un 200%, pues la encontraron a 16 pesos por un dólar y lo han llevado a más de 50 pesos por un dólar.

-En los cuatro años del período 1996-2000, es decir en 48 meses, la inflación acumulada fue de alrededor de un 30%. En el actual gobierno desde el mes de enero del 2003 al mes de febrero del 2004, en tan sólo 13 meses, la tasa de inflación acumulada fue 63%, es decir, más del doble que en los cuatro años del gobierno anterior.

-En ningún año del gobierno que precedió a este (entendido como un período de doce meses) la inflación alcanzó el 10%, ya que el promedio de inflación mensual ponderado de los 48 meses de la administración de Leonel Fernández fue siempre de menos de un 1%. En el gobierno de Hipólito Mejía en el mes de enero del 2004 la inflación fue de más de un 10% y en el mes de febrero de este mismo año superó el 11%, es decir, que en tan sólo dos meses los niveles de inflación alcanzados en el gobierno de Hipólito Mejía, de un 21%, han sido casi iguales que los niveles de inflación de los cuatro años del gobierno del doctor Leonel Fernández. Increíble, pero cierto.

-En los cuatro años del gobierno anterior se crearon alrededor de 600,000 nuevos empleos, logrando que la tasa de desempleo disminuyera de un 17% a un 13% en cuanto a la población económicamente activa se refiere. En los casi cuatro años del gobierno de Hipólito Mejía y el PPH se han perdido más de 700,000 empleos y hoy día la tasa de desempleo ha vuelto a superar los niveles del 17%, afectando de manera directa y cruel a la población joven y a las mujeres.

-El ingreso anual promedio de los dominicanos y dominicanas en el año 2000 era de 2,300 dólares y en la actualidad se ha reducido a 1,750 dólares. Es decir, tenemos menos capacidad de compra que hace 4 años.

-El costo de la canasta familiar básica se ha incrementado en más de un 100% en los últimos cuatro años: En el 2000 era de 6,796 pesos dominicanos y hoy en día es de 12,924 pesos.

-El índice de empobrecimiento macroeconómico se ha incrementado en alrededor de un 500% ya que en el año 2000 era de 10.60% y hoy día es de 59.16%.

Toda esa situación de deterioro en esos parámetros económicos ha llevado a que en la actualidad los dominicanos y dominicanas seamos muchos más pobres que hace cuatro años y que nuestra situación se haya empeorado de manera dramática. Y esto ya no puedes seguir así. Es tiempo de cambiar el rumbo hacia el progreso y el bienestar nuevamente.

Atentamente,

Euri Cabral