POR HAL WEITZMAN EN QUITO
Ecuador perdería unos 30,000 empleos al año si se deja expirar su acuerdo comercial con Estados Unidos a finales de año, dijo el principal negociador de comercio del país al Financial Times. Alfredo Palacio, presidente de Ecuador, pidió a EEUU esta semana que mantenga sus actuales preferencias comerciales un año adicional.

Pero el jefe negociador Manuel Chiriboga estaba sombrío con las perspectivas de que un acuerdo bilateral de comercio reemplace el convenio actual a la luz de la reacción de EEUU ante la decisión de revocar un contrato con Occidental, la compañía petrolera con sede en California, y confiscara cerca de US$1 millardo de sus activos.

“No estoy del todo esperanzado con que estas preferencias [comerciales] se extiendan”, añadió. “Una suspensión de más de un año pudiera conducir a la pérdida de 30,000 empleos al año y a una reducción en los ingresos por impuestos de US$40 millones.

“La inversión ya está emigrando a perú y Colombia, países que ya tienen ambos acuerdos comerciales con EEUU”.

El fin del régimen de bajas tarifas a los sectores de exportaciones ecuatorianos pudiera ser particularmente dañino para sectores como la agricultura, la pesca y los textiles, dijo.

El martes, Linda Jewell, la embajadora de EEUU en Ecuador señaló que Washington  incluso podría concluir antes el régimen de bajas tarifas. “Estas preferencias no se le pueden garantizar a ningún país que haya nacionalizado, expropiado, confiscado o haya tomado bajo su control la propiedad de corporaciones estadounidenses”, comentó.

Aunque la respuesta de EEUU ha sido atacada en Ecuador por ser desproporcionada, también se reconoce que con una contienda electoral en Ecuador en octubre, y elecciones de medio término en EEUU en noviembre, es poco probable que se alcance un acuerdo comercial antes de que un nuevo gobierno asume en enero.

Con eso en mente, Enrique Proaño, el principal vocero del señor Palacio, dijo que Ecuador había pedido oficialmente a EEUU que renovara las preferencias otro año para dar más tiempo para las conversaciones comerciales bilaterales.

Sin embargo, el señor Chiriboga expresó: “No veo muchas posibilidades de que eso ocurra con este Congreso de EEUU. Cuando perú estaba negociando con EEUU, empujó para que se extendieran las preferencias hasta que entrara en vigencia el tratado, pero Washington se negó”.

Si existiera voluntad política en ambas partes, “uno pudiera completar un acuerdo comercial  en un par de semanas”, dijo..

No obstante, el panorama para lograr que un acuerdo se apruebe por el Congreso de EEUU no es nada promisorio, añadió el señor Chiriboga.