El economista Eduardo Tejera presentó su renuncia al Partido Revolucionario Dominicano para evitar caer en dualidades y para sentirse en plena libertad de expresar su pensamiento sobre las actuaciones del actual gobierno, el futuro del PRD y, en particular, sobre los elementos que han causado la grave crisis económica y social que vive la nación.

En carta entregada al presidente y al secretario general del PRD, Hatuey de Camps y Rafael Suberví Bonilla, respectivamente, Tejera plantea que ha observado que la tendencia más ligada al gobierno que preside Hipólito Mejía ha girado hacia la derecha y cada vez olvida más su compromiso con el mejoramiento social, la equidad, la reducción de la corrupción y el sentido democrático esencial de hacer política.

«Igualmente, las otras tendencias del partido, también se han quedado rezagadas en su evolución política y su verdadero pensamiento demócrata liberal», expresa.

Tejera considera que «la mayoría han caído en un populismo de la década de los setenta, que no corresponde con la disciplina y visión moderna que exigen los nuevos tiempos».

«Parece que el poder, el dinero y el sectarismo han anquilosado y derechizado la mente de muchos perredeístas dentro del gobierno y sólo espero que la juventud del partido algún día se levante con su propio sesgo, con una rebeldía madura, y no trate de imitar lo anacrónico y negativo del pasado, sino imponer un nuevo estilo de hacer política y una nueva visión del futuro de la nación, basado en hechos y no solo en palabras y retórica vacía», expresa.

Tejera afirma que desde hace dos años se siente desencantado del rumbo que ha tomado la política general y la política económica, la moralidad pública y cierta inclinación hacia posiciones autoritarias que están en total conflicto y contradicción con los principios del PRD que él admiraba.

Tejera expresó a Hatuey de Camps sus felicitaciones por su lucha por los principios no reeleccionistas del partido y por su absoluta dedicación a la organización.

«A Fello y Milagros que igualmente son viejos y admirados compañeros les deseo la máxima suerte en su futuro», agrega.

«Debo confesar que para mi Milagros es una dama y política excepcional que sigue representando los ideales más puros del partido. Igualmente, deseo expresarle mi sentido de amistad al presidente Hipólito Mejía, quien sabe muy bien que, aunque soy un crítico del estilo de la política en general y de la política económica que escogió, eso no afectará mi amistad y afecto hacia él y toda su familia, en particular a Doña Rosa, quien siempre me ha distinguido con particular cortesía», agrega.

Tejera considera que «la nación vive uno de sus momentos más difíciles y complejos y deseo que respeten y acepten mi decisión, con la misma consideración y afecto que yo siento por muchos compañeros del partido y he aceptado la decisión de cada cual».

«Estoy convencido que yo no me he apartado de los ideales originales del partido, sino más bien el partido y, sobre todo, el gobierno se ha apartado de los principios que me ilusionaron desde joven para participar en él. Yo sigo con las mismas ideas, más maduras y más refinadas, pero no estoy seguro que las tendencias dominantes de la organización sean y piensen lo mismo. Por eso, he escogido el camino de seguir mi propia ruta y de mantener mi absoluta libertad, como demócrata cabal que soy», agrega Tejera en su carta.

Tejera era miembro del Comité Ejecutivo Nacional, del Departamento Nacional de Finanzas y de la Comisión Económica.