Estados Unidos quiere que la utilización de la Estación Espacial Internacional (EEI) se solape con actividades comerciales en la órbita baja terrestre para evitar los errores cometidos con la cancelación del programa de transbordadores espaciales, dijo este martes la directora de EEI de la NASA, Robyn Gatens.
Gatens, que participó este martes en la primera jornada de la XII Conferencia Internacional de Investigación y Desarrollo de la Estación Espacial Internacional que se desarrolla en Seattle, afirmó que sería “muy perjudicial” el fin de las operaciones de EEI antes de la existencia de destinos comerciales en órbita baja.
“Todos saben lo dañino que será si no tienen un lugar donde continuar su investigación”, añadió Gatens dirigiéndose al público de la conferencia.
En 2011, Estados Unidos canceló su programa del transbordador espacial, tras 30 años de vuelos, antes de que el país contase con un vehículo orbital para seguir enviando astronautas a EEI.
El fin de los vuelos del transbordador espacial obligó a Estados Unidos a depender durante años de las naves rusas Soyuz para viajar a la Estación Espacial Internacional.
La directora de EEI de la NASA declaró que para evitar ese “preocupante” vacío, Estados Unidos ha extendido la vida de la estación orbital hasta 2030.
La doctora Ezinne Uzo-Okoro, vicedirectora para Política Espacial de la Casa Blanca, también aseguró que la política de la administración del presidente Joe Biden es que cuando EEI deje de operar ya existan destinos comerciales en órbita baja para mantener la investigación y desarrollo en el espacio de nuevas tecnologías y productos.
Gatens recalcó la importancia de las investigaciones realizadas en EEI al señalar que “ya se están salvando vidas que no se podrían haber salvado antes gracias a la investigación realizada en la estación».
“El Gobierno estadounidense tiene una gran oportunidad de utilizar el espacio y sus plataformas para resolver los problemas más graves que son una prioridad en todo el mundo”, terminó señalando Gatens.