A girl watches a vendor prepare a stick of cotton candy in Old Havana, Cuba, Sunday, Aug. 18, 2019. Six decades ago, the U.S. implemented an embargo against Cuba with the objective of stifling the economy and bringing down the communist government, however according to many experts, it instead harmed the population while generating resilience. (AP Photo/Ismael Francisco)
El Gobierno de Cuba condenó las nuevas medidas de castigo anunciadas ayer, viernes, por Estados Unidos, que endurecen aún más el embargo impuesto a la isla al limitar las remesas de familiares y las transacciones financieras a través de terceros países.
El ministro de Exteriores cubano, Bruno Rodríguez, rechazó “enérgicamente” las nuevas sanciones, que consideró un “intento oportunista de dividir a los cubanos” y acusó a Estados Unidos de “mentir descaradamente” para responsabilizar a Cuba de “su fracaso en forzar el derrocamiento del Gobierno bolivariano” de Venezuela. “No doblegarán la voluntad de los cubanos y crecerá el rechazo universal contra el bloqueo (embargo)”, apuntó el canciller a través de Twitter.
Horas antes la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) estadounidense anunció que quedará limitada a 1,000 dólares por trimestre la cantidad que los cubanos residentes en el país norteamericano pueden enviar a sus familiares en la isla.
El organismo de control financiero dependiente del Departamento del Tesoro también indicó que desde el próximo 9 de octubre serán ilegales las remesas a familiares cercanos de funcionarios cubanos en la lista negra y miembros del Partido Comunista de Cuba. Hasta ahora no existían límites de cantidad ni de frecuencia desde que las remesas a Cuba entraran en vigencia en 2014, cuando la Administración del expresidente Barack Obama (2009-2017) normalizó las relaciones con la isla caribeña, poniendo fin a cinco décadas de hostilidad iniciada en plena Guerra Fría. Otra prohibición anunciada este viernes por la OFAC afecta a las llamadas transacciones “de giro en U”, lo que impedirá a instituciones bancarias sujetas a la jurisdicción estadounidense procesar ciertas transferencias de fondos a Cuba aunque estas se originen y terminen fuera de Estados Unidos. Estados Unidos cree que las nuevas sanciones servirán para “aislar financieramente al régimen cubano”, al que responsabiliza de la “opresión” a su propio pueblo y el “apoyo a otras dictaduras en toda la región, como el régimen ilegítimo del (presidente venezolano Nicolás) Maduro”, según un comunicado del secretario del Tesoro, Steven Mnuchin.