WASHINGTON, (AFP) – Estados Unidos reforzará su seguridad fronteriza y endurecerá las normas para contratación de inmigrantes, a falta de una reforma de las leyes migratorias por parte del Congreso, anunció ayer el gobierno.
«A pesar de que el Congreso no corrigió nuestro sistema de inmigración al no aprobar una reforma legislativa amplia, mi administración continuará dando todos los pasos posibles para avanzar sobre el progreso ya hecho en el fortalecimiento de nuestras fronteras, (y) el cumplimiento de las leyes (de contratación) en los lugares de trabajo», sostuvo el presidente George W. Bush en una declaración transmitida por la Casa Blanca.
La iniciativa del Ejecutivo está basada en leyes que ya existen, explicaron en conferencia de prensa los secretarios de Seguridad Interior, Michael Chertoff, y de Comercio, Carlos Gutiérrez.
«Hasta que el Congreso elija actuar, vamos a estar dando algunos pasos enérgicos por nuestra cuenta», manifestó Chertoff. El nuevo plan se enfoca en fiscalizar la contratación de trabajadores y reforzar la seguridad en las fronteras. En particular, según documentos entregados a la prensa, el Departamento de Seguridad Interior emitió una regulación que permitirá enviar cartas oficiales a empleadores que no disponen de adecuada información sobre la identidad de sus empleados, requiriéndoles que verifiquen el estatus de los trabajadores en un plazo de 90 días. Las multas para los patrones que emplean indocumentados a sabiendas, aumentarán 25%. Chertoff explicó que el gobierno federal exigirá a los contratistas con el Estado que usen un nuevo sistema electrónico de verificación de estatus laboral de trabajadores. «Una parte fundamental de hacer cumplir las leyes migratorias es el efectivo cumplimiento (de las normas) a nivel del país y de los lugares de trabajo», dijo Chertoff, señalando que la iniciativa apunta a proveer «herramientas efectivas y una guía clara» a los empleadores «de forma que puedan mantener una fuerza de trabajo estable y legal». Asimismo, el gobierno se compromete a través del Departamento de Trabajo a modificar el programa de trabajadores zafrales agrícolas. Para Gutiérrez, «la seguridad debe estar primero».
Sellar frontera
El plan prevé alcanzar 18,300 agentes de Patrulla de Fronteras al 31 de diciembre del año próximo, así como construir unos 600 km de vallado fronterizo para esa fecha.
Los funcionarios recordaron además que fuerzas policiales locales están siendo entrenadas para cumplir tareas equivalentes en muchos aspectos a las de agentes migratorios federales, algo muy criticado por organizaciones proinmigrantes. Al mismo tiempo que anunciaron estas medidas, los funcionarios reconocieron que Estados Unidos necesita inmigrantes para mantener su economía.
«Es claro que hay trabajos que los estadounidenses no quieren hacer, o no están disponibles para hacer», dijo Gutiérrez.