El gobierno federal corre un “riesgo significativo» de quedarse sin la facultad de contraer préstamos en la primera parte de septiembre debido a que los ingresos fiscales han caído debajo de las expectativas, de acuerdo a un nuevo análisis publicado el lunes por el Centro de Políticas Bipartidistas, un grupo de expertos con sede en Washington.
El reporte le añade presión a las negociaciones fiscales y de deuda en Washington, que continúan sin progresar. El principal responsable de la situación es el hecho de que los ingresos fiscales están muy por debajo de lo previsto, comentó Shai Akabas, el director de políticas económicas del grupo, que crecieron apenas entre 2 y 3% en lugar del 5 o 6% que se preveía.
La organización, que cuenta con un buen historial en sus estimados previos, dijo hace dos meses que las autoridades tenían por lo menos hasta octubre antes de que se presentara la amenaza de impago.
En tanto, la Oficina de Asuntos Presupuestarios del Congreso estimó el lunes que el gobierno presentó un déficit presupuestal de 746.000 millones de dólares en los primeros tres trimestres del año fiscal 2019, y se proyecta que ronde el billón de dólares al finalizar el año.
Los ingresos aumentaron en 69.000 millones y los gastos federales se incrementaron en 208.000 millones durante ese periodo. El nuevo cálculo es similar a las advertencias emitidas por el secretario del Tesoro Steven Mnuchin, quien es el principal negociador del gobierno del presidente Donald Trump en las pláticas para un acuerdo bipartidista para aumentar el límite de deuda gubernamental y evitar que los recortes presupuestales automáticos afecten al Pentágono y a las agencias locales.
Las negociaciones se estancaron antes del receso por el feriado del 4 de julio pero sin duda serán atendidas con mayor urgencia debido a que la Cámara de Representantes, de mayoría demócrata, solo cuenta con tres semanas laborales este mes antes de tomar seis semanas de vacaciones programadas con antelación.
La presidenta de la cámara baja, Nancy Pelosi, está asumiendo el liderazgo en la materia en el Capitolio junto con el líder de la mayoría en el Senado, el republicano Mitch McConnell.