SAN JOSÉ, (AFP) – La Embajada de Estados Unidos entrenó y ayudó a financiar a las fuerzas antimotines de la Policía de Costa Rica durante las movilizaciones del referéndum sobre el Tratado de Libre Comercio (TLC) en 2007, según cables diplomáticos estadounidenses filtrados por el sitio web WikiLeaks.
«La Embajada de Estados Unidos en San José participó en la definición de la estrategia policial, entrenó y supervisó el adiestramiento de oficiales de la Fuerza Pública y rentó buses para trasladarlos en las marchas de protesta contra el TLC», publicó este jueves el diario La Nación, en su segunda entrega de cables filtrados por WikiLeaks.
Para financiar estos gastos de la Policía costarricense, la Embajada usó fondos «destinados al combate del narcotráfico», según un cable.
«El Gobierno (de Oscar Arias, 2006-2010) parece estar listo para las protestas. El servicio de inteligencia tiene confianza en que sabe quiénes son los verdaderos alborotadores, pero todavía está cauteloso», según un cable del 23 de febrero de 2007, firmado por el encargado de negocios de la Embajada, Rusell Frisbie.
«La Policía puede necesitar la rápida movilización de recursos a puntos potenciales para bloquear el tránsito y a puntos álgidos de protesta por toda la capital. Por tanto, el Ministerio de Seguridad Pública solicitó a la Embajada el alquiler de buses para uso de la Policía, utilizando fondos disponibles de los destinados al combate del narcotráfico.
La Embajada proveerá diez buses para el 26 de febrero solamente», escribió Frisbie.
El TLC con Estados Unidos fue el principal problema
enfrentó el gobierno de Arias y provocó gran polarización y manifestaciones callejeras en Costa Rica. Los críticos del acuerdo intentaron impugnar el tratado en un referéndum, efectuado en octubre de 2007, pero la ciudadanía lo aprobó por estrecho margen.
Para una marcha contra el TLC convocada para el 23 de octubre de 2006, «el Gobierno había pedido (a la Embajada) otros cuatro buses, según relató el entonces embajador Mark Langdale en un cable del 31 de ese mes», publicó La Nación.
«Contactos policiales nos dijeron que esta ayuda, tras bambalinas (todo lo que el Gobierno de Costa Rica nos pidió), había resultado invaluable», escribió Langdale.
La primera divulgación de cables estadounidenses en Costa Rica el miércoles también estuvo dedicada al TLC y las notas reflejaban los temores de Washington ante la posibilidad de que San José no ratificara el TLC.
El tratado fue suscrito entre 2003 y 2004 por Washington con los países centroamericanos y República Dominicana, y Costa Rica fue el último país donde fue ratificado y donde entró en vigencia, en enero de 2009.