Chicago. Una corte federal de apelaciones decretó por primera vez que una histórica ley de derechos civiles protege a empleados LGBT de discriminación en el puesto de trabajo. La decisión podría plantear una batalla ante la Corte Suprema por el alcance de una ley de hace 53 años.
La decisión de la corte de apelaciones del Séptimo Circuito en Chicago con 8 votos a favor y 3 en contra llega solo tres semanas después de que un panel de tres jueces en Atlanta determinase lo contrario, apuntando que los empleadores pueden discriminar en base a la orientación sexual.
Organizaciones de defensa de los derechos de la comunidad LGBT elogiaron el fallo de Chicago calificándolo de «decisivo», en parte porque se considera que la corte es relativamente conservadora.
Pero la opinión mayoritaria y el desacuerdo en el caso ponen de manifiesto las profundas diferencias entre los jueces que defienden que la interpretación de las leyes puede cambiar con el tiempo y los que sostienen que deben aplicarse al pie de la letra.