AP.  JOHANNESBURGO. A pura voluntad, Estados Unidos volvió a remontar un partido al rescatar ayer un empate 2-2 con Eslovenia dentro de un vibrante encuentro del Grupo C de la Copa Mundial.

   Lo que los estadounidenses todavía no saben es porqué el  árbitro invalidó una jugada de gol que le hubiese dado el triunfo.

   Tras irse al descanso dos goles abajo, Landon Donovan y Michael Bradley nivelaron el marcador en un duelo jugado a ida y vuelta.

El suplente Maurice Edu remeció las redes en una jugada que invalidó el árbitro malí Koman Coulibaly, aunque nunca quedó claro el motivo.

   “Estoy un poco molesto”, dijo Donovan. “No sé cómo nos robaron ese último gol”.

   “Fue una buena definición y un buen gol. No estoy seguro qué fue lo que pitó. No nos dijo qué fue lo que pitó”.

   Donovan anotó a poco de comenzado el segundo tiempo, a los 48 minutos, con un soberbio remate sin ángulo desde la derecha.

   Bradley, el hijo del entrenador Bob Bradley, empató a ocho del final al rematar dentro del área tras recibir un balón que Jozy Altidore dejó picado con un cabezazo.

   Valter Birsa y Zlatan Ljubijankic pusieron en ventaja a los eslovenos.

Estados Unidos llegó a las dos unidades, ya que en el partido previo empató con Inglaterra, y Eslovenia es el líder del Grupo C, al sumar cuatro puntos.

    “Perdimos la concentración en el segundo tiempo y los estadounidenses lo aprovecharon”, comentó el entrenador de Eslovenia, Matjaz Kek al finalizar el encuentro.

El protagonista

Landon Donovan

 El delantero de Estados Unidos fue escogido como el mejor jugador del partido. Anotó el gol de descuento al inicio del segundo tiempo, cuando su equipo perdía por 0-2, y estuvo comandando el ataque de los norteamericanos en el encuentro ante Eslovenia. Al final del juego se quejó de la actuación del árbitro por haber anulado un tanto marcado por su compañero Edu que a la postre hubiese dado la victoria.