WASHINGTON. Estados Unidos prohibirá a sus ciudadanos viajar a Corea del Norte a partir del próximo mes, anunció el viernes el Departamento de Estado.
El secretario de Estado, Rex Tillerson, decidió imponer una “restricción geográfica de viajes” a Corea del Norte tras la muerte del estudiante estadounidense Otto Warmbier el mes pasado, quien cayó en coma cuando estaba preso en el país asiático.
La restricción coincide con el aumento de las preocupaciones de Washington por los recientes progresos de Pyongyang en sus programas de armas atómicas y misiles balísticos.
Es difícil cuantificar el número de estadounidenses que visitan Corea del Norte, incluso para el gobierno de Estados Unidos. Sin embargo, Simon Cockerell, del Grupo Koryo, uno de los principales organizadores de viajes guiados al país, dijo que entre 800 y 1.000 estadounidenses lo hacen cada año.
La portavoz del Departamento de Estado Heather Nauert dijo en un comunicado que “debido al aumento de las preocupaciones sobre el grave peligro de un arresto y una detención larga bajo el sistema policial de Corea del Norte, el secretario ha autorizado una Restricción Geográfica de Viaje mediante la que ningún nacional estadounidense podrá utilizar su pasaporte para viajar en, por o a Corea del Norte”.
La restricción entrará en vigor a finales de agosto, 30 días después de su publicación en el Registro Federal, el diario oficial del gobierno federal.
Cuando la medida entre en vigencia, los estadounidenses que deseen viajar a Corea del Norte podrán hacerlo legalmente sólo con un “pasaporte con validación especial”, que el Departamento de Estado otorgará tras un estudio caso por caso para “ciertos propósitos limitados sean humanitarios o de otro tipo”, se afirmó en el comunicado.
El texto no abundó sobre lo que el Departamento de Estado considera propósitos “de otro tipo”. Los estadounidenses que infrinjan la restricción podrían ser sancionados con una multa y 10 años de cárcel.