Por primera vez, el gobierno federal propone reducir el nivel de nicotina en los cigarrillos para que no sean tan adictivos. Scott Gottlieb, director de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés), le ordenó el viernes al personal de la agencia que desarrolle nuevas normas sobre la nicotina. Desde 2009 la FDA tiene la facultad de regular los niveles de ésta, pero no lo ha hecho.

Las acciones de los fabricantes de cigarrillos se desplomaron tras el anuncio. Como parte de la nueva estrategia, la FDA les está concediendo a los productores de cigarrillos electrónicos cuatro años más para que cumplan con una revisión de los productos que ya están en el mercado, señaló Gottlieb. La agencia pretende redactar normas que equilibren la seguridad con el papel que desempeñan los cigarrillos electrónicos en ayudar a los fumadores a dejar el hábito, agregó.

“Un enfoque renovado en la nicotina nos puede ayudar a lograr un mundo en el que las generaciones futuras de nuestros niños ya no se hagan adictas a los cigarrillos”, afirmó Gottlieb en un discurso ante el personal en Silver Spring, Maryland. El alquitrán y otras sustancias inhaladas al fumar hacen que los cigarrillos sean letales, pero la nicotina en el tabaco es la que provoca que generen adicción.

El consumo de tabaco es la principal causa de enfermedades cardiacas, cáncer y muertes prevenibles en Estados Unidos, con más de 480.000 fallecimientos al año. Sin embargo, la tasa de fumadores lleva décadas en descenso y en la actualidad es de aproximadamente el 15%.

Gottlieb dijo que le ha pedido al Centro de Productos del Tabaco de la FDA que analice si el disminuir el nivel de nicotina en los cigarrillos generaría un mercado negro de productos con mayor cantidad de ese alcaloide, y qué papel desempeñan los cigarrillos electrónicos y otros productos en reducir el daño que provoca el fumar. Desea también que se establezcan nuevas reglas para atender los productos de tabaco de sabores y su relación con los niños.

Los cigarrillos electrónicos, impulsados por baterías, convierten la nicotina líquida en un vapor inhalable.