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Viena (EFE).- El presidente de EEUU, George W. Bush, y los líderes de la UE ratificaron ayer el compromiso de concluir con éxito la Ronda de Doha para la liberalización del comercio mundial a finales de 2006. Las dos partes plasmaron sus intenciones en la declaración final de la cumbre bilateral que celebraron en Viena, en la que hacen un llamamiento a los miembros de la Organización Mundial de Comercio (OMC) para que hagan todos los esfuerzos necesarios con vistas a lograr un acuerdo ambicioso y equilibrado.
Es necesario, según el texto, que los responsables de Comercio de la OMC alcancen progresos sustanciales en las principales áreas de negociación en las próximas semanas para garantizar que no se pierde esta oportunidad histórica para la liberalización del comercio. EEUU está dispuesto a aportar su grano de arena, según el presidente George W. Bush, quien aseguró que será una tarea difícil porque tratamos de hacer ajustes difíciles en las políticas internas para lograr un acuerdo que sea justo para todos. Pese a las dificultades, no podemos dejar que la ronda fracase porque eso supondría perder una gran oportunidad para combatir la pobreza, subrayó el mandatario estadounidense en rueda de prensa al término de la cumbre.
Por parte de la UE, el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, se mostró convencido de que, tras las discusiones de hoy, es posible lograr un resultado positivo en las negociaciones de Doha.
En su opinión, es también crucial alcanzarlo, no sólo desde el punto de vista del comercio, sino también desde el del desarrollo.
Las negociaciones se encuentran en estos momentos en una fase decisiva y la UE y EEUU tienen la responsabilidad conjunta de negociar un acuerdo satisfactorio que favorezca el crecimiento y la prosperidad, según Barroso.
La próxima semana podría avanzar un paso más, en la reunión que van a celebrar en Ginebra, a partir del próximo día 29, buena parte de los ministros de Comercio de la OMC.
El director general de la Organización, Pascal Lamy, les citó en esa fecha para intentar alcanzar acuerdos en las fórmulas y cifras que permitan a los miembros de la OMC calcular el nivel de rebajas arancelarias que tendrían que aplicar a sus importaciones agrícolas e industriales.
Si ese objetivo se consigue, el camino quedaría despejado para que el 31 de julio se pudieran lograr acuerdos similares en servicios, otra área fundamental de las negociaciones de la Ronda del Desarrollo de Doha (2001) que en teoría debe de concluir a fines de 2006.
