EI peregrinaje largo, arduo y poco reconocido de Barack Hussein Obama

EI peregrinaje largo, arduo y poco reconocido de Barack Hussein Obama

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A Raúl Yzaguirre, Embajador de Los Estados Unidos; nación donde recibí mi educación superior.

Hace unos días, Barack Hussein Obama inauguró su segundo y último período gubernamental con un discurso breve, de carácter explicativo y altamente progresista. Sus palabras preludian un período de grandes confrontaciones y también de realizaciones.

Obama ha dirigido, directamente, al pueblo en una situación económica muy compleja y grave como lo hizo Franklyn Roosevelt. No es casual que, ambos presidentes, Roosevelt y Obama, sean los únicos demócratas electos con más de 50% del electorado en dos periodos.

Su gestión gubernamental la podemos considerar como un tortuoso peregrinaje que se inicia en el umbral del su primer gobierno con un error de su parte. ¿En qué consistió? en no comunicarle a la nación la situación desastrosa que encontró. Súmase los obstáculos que enfrentó en el ejercicio  de gobierno, como:

– Una política monetaria súper expansiva.

– Un sistema financiero en desplome fruto de la eliminación de las leyes regulatorias que llevaron a las instituciones financieras a una especulación rampante, la que pudo ocurrir únicamente por la derogación de la Ley Glass-Steagle en 1999. Esta ley prohibía, a partir del 1934, cualquier relación económica entre instituciones financieras diferentes. Funcionó perfectamente por 75 años. Los republicanos la derogaron en 1999 y Clinton cometió el error de no vetarla, fortaleciendo enormemente el proceso de capitalismo fundamentalista que comenzó con fuerza con Ronald Reagan a partir del 1982.

– Dos guerras simultáneas, la de Irak y Afganistán, financiadas con  déficits.

– La bancarrota de la industria automotriz.

– Una súper burbuja inmobiliaria originada por la crisis financiera.

– Caída abrupta en la producción de petróleo y gas.

 – Un partido republicano, creador de la Crisis, en actitud obstruccionista fruto de la creciente influencia del Tea Party.

– La existencia de una minoría importante que repudiaba a Obama por ser negro (en un país de 76% blanco y solo 24% negro y latino), por sus orígenes, criado sin padre, nombre musulmán, etc.

– Una contracción de 5% del PBI en el primer año y pérdidas de 600,000 empleos mensuales en aproximadamente dos años.

 Obama, con esa tenacidad y visión que le caracteriza, pudo salvarlos y alcanzar hechos que sentaron bases sólidas para el arranque definitivo de la recuperación económica norteamericana y con ella, el sosiego y la estabilidad emocional de la población norteamericana. Procedió a lo siguiente:

– Prestar a los bancos (a cambio de acciones) la cantidad necesaria para evitar el colapso financiero, y luego recuperarla.

– La restructuración (a cambio de acciones) de la importante  industria automotriz, y recuperar lo prestado.  

– Un estímulo (medida keynesiana) de 786,000 billones de dólares para compensar la reducción de la demanda como consecuencia de la contracción de un 5% del PBI en la demanda en el 2009.

– Salida de la guerra de Irak y Afganistán.

– Una reducción dramática de la política intervencionista como lo demuestra su posición en los conflictos del Medio Oriente.

– Logró la aprobación del primer programa a universal de salud, eludido por todos los presidentes de Estados Unidos desde el año 1940.

– Creó las condiciones, con la ayuda de la tecnología y también de la suerte, para ejecutar un vigoroso relanzamiento de petróleo y gas no convencional. Así, una industria decreciente que recibió en el 2008, donde las importaciones de petróleo crecían y las reservas de gas eran solo por 30 años, se logró un aumento de 779,000 millones de barriles diarios de petróleo en el 2012, conforme a la Agencia Norteamericana de Energía. Y un aumento proyectado de 900,000 millones de barriles diarios de petróleo en el 2013. Se han aumentado las reservas de gas en cuatro años, de 30 años a 120 años.

– Logró que se aprobara la Ley Dodd-Franks. Con ella, se restablecieron los controles de las instituciones financieras.

 No debemos olvidar que la economía dominicana es abierta y depende en más del 70% de la norteamericana: sus logros nos tocan profundamente.

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