El Cairo. AFP. El ejército egipcio advirtió hoy que no permitirá que nadie «amenace la seguridad nacional» y llamó a los partidarios del presidente depuesto Mohamed Mursi a poner fin a sus sentadas de protesta, tras la muerte de al menos 42 personas por disparos en una concentración islamista.
«No permitiremos ninguna amenaza a la seguridad nacional egipcia, sean cuales sean las circunstancias», declaró el portavoz del ejército, Ahmed Ali, quien llamó a finalizar las protestas y prometió a los manifestantes que siguen acampando en varias plazas de El Cairo que no se les perseguirá penalmente.