Rusia necesita además consolidar sus ganancias en el sur si desea mantener el control terrestre del Donbás hacia Crimea
Rusia intenta frenar la contraofensiva de Ucrania en el este y sur de ese país, y observa con inquietud cómo se reavivan algunos conflictos “congelados” en el espacio postsoviético. “El adversario (….) intentó avanzar sin éxito en las inmediaciones de Myroliubivka, Mala Seiydemynukha y Bilohirka de la región de Jersón. Las unidades de las FFAA rusas repelieron todos los ataques”, dice el parte difundido este domingo por el Ministerio de Defensa de Rusia.
A la vez, según el Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW), la mayor parte del noreste de Ucrania bajo control de las tropas rusas sigue “altamente vulnerable” a las continuas contraofensivas ucranianas. Los analistas del centro opinan que es posible que Moscú haya decidido renunciar a la defensa de estas zonas para priorizar la protección de las ganancias territoriales en el sur.