Managua, (EFE).- El presidente del Consejo Supremo Electoral (CSE) de Nicaragua, Roberto Rivas, informó hoy que el Ejército y la Policía de este país han reforzado la seguridad en los municipios donde han ocurrido actos de violencia en las últimas horas, previo a la celebración de los comicios del domingo próximo. El funcionario dijo en rueda de prensa que en los municipios de El Sauce y Matiguás, noroeste y norte del país, respectivamente, grupos de desconocidos sustrajeron o incendiaron 649 cédulas de identidad, necesarios para ejercer el sufragio.
«Hay un absoluto refuerzo de la Policía y del Ejército» en esas localidades, precisó. Cientos de personas han reclamado en esos municipios sus documentos oficiales para votar, pero Rivas sostuvo que el CSE no retiene las cédulas.
Según el juez electoral, en Matiguás, en la provincia norteña de Matagalpa, los manifestantes ingresaron a la fuerza a una delegación electoral, golpearon a los empleados y sustrajeron o incendiaron 562 documentos para votar.
En El Sauce, en la provincia de León (noroeste), otro grupo de reclamantes destruyó 87 cédulas, denunció Rivas. El funcionario explicó que los ciudadanos pueden retirar sus cédulas, incluso mañana sábado, un día antes de las votaciones.
Pese a los actos de violencia, el titular de la autoridad electoral afirmó que, por el momento, no se ha suspendido los comicios en ninguna localidad del país. «No hay suspensión de elecciones en ningún municipio, salvo que la situación de violencia la promuevan estos grupos que han estado pidiendo cédulas», advirtió.
«Este tipo de situaciones a los únicos que afecta es a los ciudadanos de esos municipios», agregó. El CSE dio a conocer hoy que concluyó la distribución del material a utilizarse en los comicios del domingo en Nicaragua. Este país centroamericano vivió hoy el segundo día de reflexión previo a los comicios con denuncias entre los partidos de violar el «silencio electoral» y quejas de irregularidades en la acreditación de los fiscales que cuidarán las votaciones.
El jefe de campaña de la opositora alianza Partido Liberal Independiente (PLI), Eliseo Núñez Morales, acusó al CSE de poner «trabas» a la acreditación del 25 por ciento de sus fiscales encargados de cuidar los votos.
Rivas, sin embargo, negó tales obstáculos y señaló al PLI de sustituir en los últimos días a unos 17.000 de sus fiscales, por lo que el CSE todavía no entrega las acreditaciones oficiales. En las elecciones del domingo en Nicaragua, el presidente y candidato a la reelección en el cargo, Daniel Ortega, favorito según todos los sondeos, aspira a continuar en el poder pese a la norma constitucional que le prohíbe la reelección inmediata.
Esa norma, no obstante, fue declarada inaplicable por magistrados oficialistas de la Corte Suprema de Justicia. Ese fallo ha sido calificado de «inconstitucional» y de «golpe a la democracia» por los opositores. En los comicios del domingo, unos 3,4 millones de nicaragüenses están habilitados para elegir a un presidente, vicepresidente, 90 diputados ante la Asamblea Nacional y 20 ante el Parlamento Centroamericano (Parlacen). EFE