Roma. EFE. Irreverente y atrevido, el movimiento punk que marcó a toda una generación a finales de los años setenta tuvo también, en Europa, una importante influencia en las artes visuales que se ha mantenido viva hasta hoy y que puede verse estos días en una exposición en el Palacio de los Médicis de Roma.
Europunk es el título de la muestra que propone un recorrido por el período más fructífero de la música punk (1976-1980) con especial atención a su influencia en el arte a través de más de quinientas piezas, muchas de ellas inéditas, en el marco de un palacio renacentista de una de las familias más notables de Florencia.
La exposición abre con las notas de Sex Pistols en su primera aparición en televisión en 1976, en el programa So it goes, fecha que muchos consideran como el nacimiento oficial del movimiento punk, y se cierra con la intervención de Joy Division en la cadena de televisión británica BBC en 1979 y el nacimiento de la New Wave.
Pero, más que música, Europunk es una reivindicación de la influencia que estos grupos supusieron para el arte de aquella época casi sin querer, desde la banda de Sid Vicious hasta The Clash.