Un 11.8 por ciento de las adolescentes que abandona los centros educativos lo hace por haber quedado embarazada y en su mayoría no sobrepasan el nivel básico, reveló un estudio del Fondo de Población de las Naciones Unidas (Unfpa) y el Consejo Nacional de Población y Familia (Conapofa).
Los resultados de la investigación Maternidad y paternidad en adolescentes arrojan, además, que las posibilidades de continuar los estudios es menor para las muchachas de clase pobre que para las de clases media y alta.
Así, las que estudian en escuelas públicas y colegios privados, de estrato pobre, son expulsadas del centro o remitidas de la tanda matutina a la nocturna, mientras que a las de clase media se les presenta la posibilidad de ser estudiantes libres, es decir, que sólo se presenten al recinto educativo a tomar los exámenes.
La dirección de los centros de clase pobre alega presión de los padres de otros alumnos para expulsar a la muchacha embarazada. También se cree que mantenerlas en el recinto incita a otras a iniciarse en las relaciones sexuales.
Otra situación que se presenta en ambos casos es la salida voluntaria de la futura madre por temor.
Rezagadas en las aulas. El 35.2% de las adolescentes está rezagada en la escuela, lo que significa que no cursa el nivel que le corresponde de acuerdo con su edad.
El porcentaje de rezago escolar en las madres adolescentes es más de dos veces mayor que en las no madres con un 67.1%.
Orientación recibida. Para todos los muchachos que fueron consultados, la escuela es su principal fuente de información sobre sexualidad y reproducción. Sin embargo, la investigación reveló que no conocen la diferencia entre VIH-sida y el uso de los métodos anticonceptivos.
Los encargados del estudio cuantitativo y cualitativo fueron Tomiris Valerio, Juan Pinales, Tahira Vargas y Miguelina Ramírez.
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Recomendaciones
Los investigadores que elaboraron el estudio recomendaron que se establezca la educación sexual como una asignatura de la educación básica, el incremento del monitoreo por parte de la secretaría de Educación, así como la realización de campañas educativas para prevenir embarazos no deseados. La investigación se hizo en base a al Censo Nacional de Población y Vivienda 2002, entrevistas de profundidad y grupos focales en distintos sectores.