El director ejecutivo del Consejo Nacional para el VIH y el Sida (CONAVIHSIDA), doctor Enrique González, reveló que el 4.8 por ciento de la población privada de libertad vive con VIH, siendo uno de los grupos de más altos indicadores de la epidemia en la República Dominicana.
González citó datos de la Encuesta de Vigilancia de Comportamiento con Vinculación Serológica 2020, auspiciada por el CONAVIHSIDA, en una reunión sostenida con el director general de Prisiones, coronel Roberto Hernández, donde se identificaron áreas para la intervención en los centros penitenciarios.
El director del CONAVIHSIDA indicó que el gobierno organiza una estrategia conjunta con la Dirección General de Prisiones y el Servicio Nacional de Salud (SNS) para abordar la situación en forma integral y evitar que se expanda a la población general.
“Los datos de la Encuesta Serológica -aseguró- nos han motivado a identificar áreas de intervención y a organizar acciones estratégicas dirigido a mejorar la calidad de vida de las personas privadas de libertad, focalizadas en aquellas que viven con VIH”.
El funcionario indicó que, debido al movimiento de entrada y salida de los visitantes, se corre el riesgo de que se forme una cadena de transmisión que mueva el virus hacia la población general, poniendo en riesgo los avances alcanzados por el país frente a la epidemia.
“Esta es una situación que hemos heredado y tenemos la responsabilidad de abordarla de inmediato, a fin de prevenir un retroceso en los indicadores de la epidemia”, advirtió González.
Recordó que el VIH se mantiene como una epidemia concentrada en las poblaciones vulnerables, entre las que se incluyen las personas privadas de libertad.
Según datos recientes de la Dirección General de Prisiones, en la República Dominicana existe una población carcelaria de 27,670 recluida en los cuarenta y dos centros penitenciarios del país.
El doctor Enrique González adelantó que la Dirección General de Prisiones y el CONAVIHSIDA trabajan en un acuerdo tripartito, junto al SNS, que sirva de marco a las acciones de prevención y atención que se llevarán a cabo en los centros penitenciarios.
González resaltó la sensibilidad y apertura de la actual gestión de la Dirección General de Prisiones y su disposición a establecer una alianza con el CONAVIHSIDA y otras instituciones para abordar la situación
El director general de Prisiones, coronel Roberto Hernández, aseguro que la presente gestión de gobierno tiene interés en fortalecer el componente de derechos humanos en la población privada de libertad, y resalto la necesidad de poner énfasis en los temas de salud.
Expresó que esa dirección encamina acciones para mejorar la situación de salud de las personas privadas de libertad, y citó el ordenamiento de las visitas conyugales como uno de los mecanismos de control.
El plan prevé que las personas privadas de libertad conozcan su estatus serológico, además de promover las medidas de prevención adecuadas para prevenir la expansión del virus, entre otras acciones.
“La salud es un derecho fundamental de todos los ciudadanos y eso lo tenemos claro en la gestión penitenciaria de hoy”, precisó el coronel Hernández.
El director general de Prisiones y del CONAVIHSIDA reiteraron el interés del gobierno actual en mejorar la condición de salud de la población, y fortalecer el componente de derechos humanos incluida las personas privadas de libertad.
En la reunión estuvieron presentes, por el CONAVHISIDA, el director Enrique González, Melvin Brioso, gerente técnico; Humberto López, coordinador de Poblaciones Clave; y por la Dirección General de Prisiones, el director Roberto Hernández, Carlos Jiménez, encargado de Salud; Anyelo Frías, Consultor Jurídico; y Sara Pérez, encargada de Planificación y Desarrollo.