WASHINGTON. AFP. El presidente de EEUU, Barack Obama, confirmó ayer que el acuerdo sobre el programa nuclear iraní entre Teherán y las grandes potencias se aplicaría a partir del 20 de enero, como lo anunció poco antes el ministro iraní de Asuntos Exteriores.
«A partir del 20 de enero, Irán empezará a eliminar sus existencias de uranio altamente enriquecido y a desmantelar parte de la infraestructura que vuelve posible este enriquecimiento», declaró el mandatario.
Todas las cláusulas del acuerdo temporal «permiten hacer avanzar nuestro objetivo de impedir a Irán dotarse de un arma nuclear», añadió Obama. «Vamos a partir de ahora a concentrarnos en el trabajo crucial que apunta a obtener una resolución exhaustiva que tome en cuenta nuestras inquietudes relativas al programa nuclear iraní», declaró.
«No me hago ilusiones en cuanto a la dificultad de alcanzar este objetivo, pero en nombre de la seguridad nacional y de la paz y la seguridad en el mundo, llegó la hora de darle una oportunidad a la diplomacia», concluyó.
Obama reiteró también su llamado a los legisladores a que no voten unilateralmente nuevas sanciones contra Irán, como muchos de ellos prevén hacer en las próximas semanas. «Sanciones sin precedentes y una diplomacia fuerte permitieron llevar a Irán a la mesa de negociaciones», destacó.
«Imponer más sanciones hace correr el riesgo de un fracaso de nuestros esfuerzos para resolver este problema de manera pacífica, e interpondré mi veto a toda ley que imponga nuevas sanciones en medio de las negociaciones», advirtió.