El ADN sembró  50 mil árboles nativos y endémicos

El ADN sembró  50 mil árboles nativos y endémicos

Más de 50 mil especies nativas y endémicas han sido sembradas en Santo Domingo en los últimos cuatro años, como parte del  Plan Verde de Arborización que ejecuta el Ayuntamiento del Distrito Nacional (ADN), informó  Enrique García, director de Gestión Ambiental de esa institución.

El funcionario destacó que el bulevar de Las Caobas, en la  Winston Churchill, fue sembrado de caoba, una especie decretada el año pasado como árbol nacional del país.

“Es un árbol emblemático, auténticamente dominicano, por eso la Alcaldía lo ha revalorizado, por eso usted lo encuentra en esa zona de la ciudad”, sostuvo el representante del cabildo.

Solamente en esa vía el ADN ha sembrado mil 500 especies, en tanto que   la intersección  de las avenidas 27 de Febrero y Tiradentes ha sido cubierta por corozo, otro árbol nativo  del país.

García recordó que  años atrás la ciudad estaba llena de grandes corozales, pero con el urbanismo acelerado esta especie prácticamente desapareció.

De ahí, dijo, el ADN la introduce de nuevo para conservarla, lo cual se ha hecho con otras especies nativas que han sido plantadas en diversos espacios públicos de la ciudad.

Dijo que el objetivo de la Alcaldía es crear una infraestructura verde, sustentable y sostenible en el tiempo, económica y ambientalmente

Urbanista.  Sin embargo, para la urbanista Amparo Chantada ese plan ha sido un fracaso, lo que atribuye a que los árboles sembrados no reciben el mantenimiento adecuado.

Considera que el grado de contaminación en la ciudad de Santo Domingo es tan elevado que la mayoría de su foresta está enferma, lo que se observa en las palmeras del Malecón.

Chantada se refirió, además, al parque Mirador Sur, que estima abandonado por falta de mantenimiento de su flora, algunas sustituidas por árboles nativos, pero no para la ciudad sino para el campo.

En ese sentido, la ambientalista puso el ejemplo de las palmeras que han sido sembradas en la ciudad, la mayoría de las cuales  están  en condiciones deplorables, por descuido.

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