Algunos sectores ganan y otros pierden con la caída del petróleo, pero el balance es positivo para las economías importadoras. Con un modelo econométrico el Banco Central estima dos escenarios, concluye que en 2015 el abaratamiento de gasolinas (regular y premium) reduciría los ingresos del Fisco entre 2.4% y 6.8%, en millones RD$2,251.4 (US$49) y RD$5,628.4 (US$122). Asume el barril de petróleo en US$82 y US$69, es decir, 10% y 25% menos comparado con US$92 presupuestado.
Que las pérdidas bajarían a RD$1,238.2 (US$27) y RD$3,517.7 (US$76) millones por la recaudación adicional del mayor consumo de gasolinas. En total, de RD$51,285.9 (US$1,117) presupuestado, a RD$50,047.7 (US$1,090) o RD$47,768.2 (US$1,04) millones.
Agrego. Siguiendo la lógica del estudio, como el petróleo WTI ha caído 43% desde el 2 de enero, la pérdida sería mayor. Sin embargo, respetando los parámetros del modelo, considerando ingresos adicionales por mayor consumo de gasoil, que es razonable, y corrigiendo las siguientes fallas, de pérdidas de ingresos para el Fisco se pasaría a ganancias en 2015.
Uno. Se limita a evaluar el impacto en el Ad-Valorem de 16% (Ley 557-05) con el argumento erróneo de que “exclusivamente” será la recaudación afectada. Es cierto, el impuesto específico (Ley 112-00) por galón no cambia, pero también es verdad que aumenta la recaudación al aplicarse el impuesto a una base más amplia por aumento del consumo de gasolinas. El mismo estudio estima de consideración (elasticidades 0.28 y 0.46) el consumo adicional cuando el precio cae 1%.
Dos. Olvida que el objetivo es estimar el impacto de la caída del petróleo en los ingresos fiscales, cuando se va por otro camino introduciendo los temas efecto neto en la economía y en el presupuesto del Gobierno. En el primero, sumando el ahorro en la cuenta corriente de la balanza de pagos por reducción de la factura petrolera; en el segundo, sumando el ahorro en el subsidio eléctrico por reducción del déficit. Afirma: “pérdidas menores (entre 27 y 76 millones de dólares) desaparecerían por completo incorporando el ahorro de subsidio eléctrico”. Remacha: “El resultado final indica que la pérdida de recaudaciones tributarias sería más que compensada por la disminución del gasto que se produce como consecuencia de un menor subsidio eléctrico”. Son cosas diferentes.
Tres. Además, el impacto en el presupuesto dependerá de lo que haga el Gobierno con el ahorro. De hecho el administrador de la CDEEE dijo que este año lo usará para reducir el subsidio, agrego, para el 2015 tiene tres posibilidades: a) si mantiene la política, la tarifa eléctrica no bajará y el subsidio será menor a lo presupuestado; b) si compensa al usuario para bajar la tarifa, el subsidio será el presupuestado, y c) si comparte el ahorro menor será el subsidio y también la tarifa.
Cuatro. Sub estima el subsidio del sector eléctrico, compara el histórico (US$650 millones) que corresponde al petróleo a US$79/ barril con los US$889.2 millones presupuestados para 2015. Debió comparar con el agujero entre ingresos y gastos del sector eléctrico que superara los US$1,500 millones.
En suma. Con modelos o sin él, no hay razón para estimar pérdidas de ingresos fiscales, la caída de precio aumentará el consumo de combustibles y las actividades económicas.