SANTIAGO.   Ante fuertes medidas de seguridad  la jueza del Tribunal de Atención Permanente de este distrito judicial, Bleisy Gómez, dictó ayer  un año de prisión como medida de coerción contra Jonathan de Jesús Minaya Torres,  quien el domingo asesinó  a cuchilladas a su exesposa, la estilista Miguelina Martínez.

Las puertas del hospital Cabral y Báez tuvieron que ser custodiadas por   miembros   de la Policía Nacional,  debido a que una multitud de vecinos de la mujer amenazaba con entrar y hacer justicia con sus propias manos, en caso de que la medida no fuera la  justa.

 La coerción fue conocida   en la sexta planta del hospital, donde estuvo  la fiscal Luisa Liranzo, ya que   Minaya   está hospitalizado  con golpes en la cabeza, las piernas, los brazos y el tórax pero se determinó que podía ser enjuiciado.

Aplazaron.  Antes de ayer la  jueza Blesi Torres, del Departamento de Atención Permanente,  aplazó el conocimiento de la medida de coerción hasta  que los médicos del hospital emitieran una certificación sobre el estado mental de Minaya Torres. 

Dispuso la evaluación porque se argumentó que sufre de demencia. Los médicos, sin embargo, establecieron que está en condiciones de  enfrentar el conocimiento de la medida.

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Piden justicia

 Un grupo de mujeres, apostadas frente al hospital, solicitó a la Fiscalía que esté pendiente de este caso para que se le aplique todo el peso de la ley al responsable y no se deje chantajear por los  familiares  y abogados. Por otro lado, en   Pueblo Nuevo  se registraron protestas que incluyeron la  quema de    neumáticos y el lanzamiento de escombros en las calles. Todos piden justicia por el hecho.