La trayectoria del Banco Central de la Republica Dominicana ha dejado su impronta, en nuestra economía insular, como un punto de apoyo (FULCRUM), desde donde emanan las directrices para nuestro desenvolvimiento económico.
Creado el 9 de octubre de 1947, de conformidad con la Ley Orgánica No.1529, inició sus operaciones el 23 de octubre del mismo año, estableciéndose como un organismo regulador descentralizado y autónomo. En la actualidad se rige por la Ley Monetaria y Financiera No. 183-02.
En sus casi 75 años de vida, ha tenido que enfrentar crisis de todo tipo, llegando inclusive a disentir de las directrices del Poder Ejecutivo.
Sus 29 gobernadores, han desarrollado un desempeño encomiable, aun dentro de la incidencia de enormes adversidades, que supieron campear magistralmente.
Sin embargo, y por su permanencia en el cargo de Gobernador, han sido dos de ellos los que imprimieron un sello singular a la institución. El Dr. Diógenes Fernandez (1963/1976) y el Lcdo. Héctor Valdéz Albizu (1994/2000 y 2004 hasta la fecha).
El Dr. Diógenes Fernandez, además de su probada honradez, entronizo un estilo muy particular a su administración de casi 14 años.
Sin temor a equivocarme, fue el motor que impulsó la modernización del BANCENTRAL mediante programas de captación y capacitación de técnicos calificados, los que enviaba al extranjero para que a su regreso reestructuraran y dinamizaran la gestión de la institución. Inclusive, muchos de estos técnicos se trasladaban a otras dependencias estatales para la capacitación de su personal técnico.
Creador del Fondo de Inversiones para el Desarrollo, FIDE; dinamizo la economía nacional a través de un redireccionamiento de recursos frescos hacia los sectores agropecuarios, industriales y fabriles, de zonas francas.
Además, no solo pensó en el desarrollo industrial dominicano, para abastecer de productos nacionales al mercado local, si no también que tuvo la visión del potencial de la ¨Industria sin chimeneas¨ al establecer el Fondo para el desarrollo de la Infraestructura Turística, INFRATUR. Con esta iniciativa se desarrollaron los primeros polos turísticos del país.
Después del Dr. Diógenes Fernandez, transcurrieron 13 gobernaciones, hasta que fue de nuevo designado el Lcdo. Héctor Valdez Albizu, el discípulo mas aventajado del otrora gobernador innovador.
De su autobiografía, tomare la siguiente relación de su accionar profesional:
¨ Comenzó a laborar en el Banco Central de la República Dominicana en el año 1970, como Asistente Técnico en el Departamento de Estudios Económicos, llegando a ocupar el cargo de Director de dicho Departamento desde 1984 hasta 1986; Subgerente de Política Monetaria y Cambiaria del l986-l990; Asesor de la Junta Monetaria, l987-l989; Representante del Banco Central ante el Consejo de Administración del Banco de Reservas, l991-l992; Subgerente General, l991-l993. El 4 de enero de 1993 fue designado Administrador General del Banco de Reservas de la República Dominicana, hasta el 31 de agosto de 1994. cuando fue designado Gobernador del Banco Central de la República Dominicana, posición en la cual fue reconfirmado en agosto de 1996 por el entonces Presidente de la República, Dr. Leonel Fernández Reyna, otorgándole el rango de Secretario de Estado, cargo que ocupó hasta el 16 de agosto de 2000. Nuevamente, el 16 de agosto de 2004, el ex – Presidente Constitucional de la República, Dr. Leonel Fernández Reyna, le designó Gobernador del Banco Central de la Republica Dominicana; subsecuentemente fue ratificado en los años 2006, 2008, 2010 y reconfirmado en agosto de 2012, 2014 y 2016 por el Presidente de la República, Danilo Medina; ratificado de nuevo por el actual Presidente Constitucional de la Republica, Lcdo. Luis Rodolfo Abinader Corona¨.
En adición a su experiencia administrativa y técnica, también ha publicado diversos estudios de carácter económico y financiero, muchos de los cuales han sido publicados en medios especializados y divulgados en conferencias internacionales.
Al Lcdo. Valdez Albizu también le ha tocado lidiar con situaciones de ingobernabilidad económica asi como también lo hizo el Dr. Diógenes Fernández. Ambos han sabido sortear estos infortunios económicos de manera magistral y con una perspectiva, a largo plazo, muy encomiable.
En lo institucional ha promovido también la excelencia académica a través de numerosas becas para egresados de nuestras universidades, asi como también programas de alto impacto social.
Dentro de su administración recibió dos importantes premios de parte de prestigiosas revistas internacionales especializadas en temas de economía y finanzas, siendo estos el “Global Finance Central Banker Report Card Grado A» de la revista Global Finance, el cual fue otorgado a tan sólo cuatro gobernadores o presidentes de bancos centrales de la región de América Latina y el Caribe, y el “Gobernador del Año para la región del Caribe” otorgado por la revista Global Markets.
Estos galardones son el resultado de una evaluación que abarca un excelente desenvolvimiento en sus funciones como gobernador del Banco Central de la República Dominicana y al éxito obtenido en áreas tales como el control de la inflación, metas de crecimiento económico, estabilidad monetaria y administración de las tasas de interés, entre otros; estas premiaciones tuvieron lugar en el transcurso de las reuniones anuales del Fondo Monetario Internacional (FMI) y del Grupo del Banco Mundial (BM), celebradas del 11 al 15 de octubre, del año 2017
Como el lector podrá apreciar, el Banco central de la republica Dominicana ha tenido dos gobernadores muy singulares, que han sido colocados en sus posiciones en épocas muy difíciles para nuestra economía. Por fortuna, ambos han cogido el toro por los cuernos y encausaron las variable económicas hacia la dirección correcta, aun con las malquerencias típicas del modelo político-clientelar dominicano. La coherencia se ha impuesto a las demandas desmedidas de sectores de poder, los cuales han tenido que reconocer el valor y capacidad extraordinaria de estos dos funcionarios.
El próximo 23 de Octubre, el BANCENTRAL cumplirá sus 75 años de labor tesonera y previsora de nuestra economía nacional.