El baño, un espacio para la relajación

El baño, un espacio para la relajación

Un baño no tiene que ser un espacio destinado exclusivamente para el aseo personal, puede convertirse también en un lugar para la relajación si se toman algunas medidas, que necesariamente no tiene que ser costosas. Un baño con buena ventilación, buena iluminación y que le permita moverse con facilidad es un buen candidato para convertirse en el refugio que le permita retomar el sosiego perdido luego de un estresante día de trabajo.

Al decorar un baño, debe elegir objetos que sean agradables a la vista y al tacto porque las sensaciones visuales y táctiles son ingredientes  principales cuando de relajación se trata. Por tanto, deje que este cuarto estimule estos dos sentidos.

Una bañera siempre es útil

El que no pueda invertir en una bañera de gran tamaño no debe detenerla, lo importante es que le permita acomodarse dentro, y pasar algún tiempo disfrutando de espumas, sales y agua tibia.

También puede adquirir una bandeja para la bañera, en la cual depositar un libro o una revista, de manera que pueda gozar de una buena lectura mientras se relaja.

Sonidos y aromas

La música amansa a las fieras. Imagínese lo que hará con su cansado cuerpo si la escucha en la bañera o mientras hace su ritual diario de belleza y aseo. Además, puede funcionar para crear una barrera que le separe momentáneamente de las distracciones de su vida diaria. Para aprovecharla, basta con instalar un altavoz en algún rincón seguro del baño. También puede adquirir un equipo de sonido a prueba de agua.

En cuanto a los aromas, la manera más accesible de estimular el sentido del olfato para transportarla a un mundo de calma son las velas aromáticas. Sin embargo, también puede lograrlo a través del uso de champús o jabones aromáticos, o quemando ciertas esencias.

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