Nacido en Houston . Texas, en 1946, se puede decir que Billy Preston fue un niño prodigio, al parecer así lo califican todos sus biógrafos. Realizó grandes trabajos musicales y fÍlmicos, porque tuvo participación destacada en proyectos importantes de su tiempo, hacia la década del 60. Por alguna razón que en su biografía no figura Preston hizo excelente amistad con rockeros ingleses, acción que le valió una relación privilegiada con músicos como Joe Cocker, Los Beatles, Los Rolling Stone y Eric Clapton, entre otros.
Digamos que era un bohemio consumado, a punto de ser consumido, pero reaccionó a tiempo y las drogas dejó, para continuar con su carrera.
Aquella sonrisa de amigo que tocaba a gusto con los amigos, queda como una fuente gigante de alegría e inspiración, en un músico de notable talento, continuador del soul, del blues y del R&B y el jazz.
Hacia 1969 inicia su amistad con George Harrison, amistad que le llevaría, porque a decir verdad, si escuchamos el cd Bangladesh, aquel memorable concierto para una joven república separada, vinculada al que fuera Gurú de Harrison entonces, escucharemos emocionados la voz de Harrison cuando dice que quiere presentar ( A friend of my, Billy Preston ) y el órgano sonó con rabia sacra al introducir un soul gospel, titulado Esa es la manera, en que el señor lo ha creado, Thats The way God Planned it.
Aquella multitud rugía de contento, al escuchar a Billy Preston cantando hasta el extremo de un lirismo vocal con brío y desfalleciente.
Lo recuerdo muy bien, Billy, lo recordamos todos, porque más de una vez esa canción nos enloqueció y piel de gallina puso en nuestros cuerpos, escalofrío Billy, escalofrío, porque habías combinado toda la fuerza del soul music con un toque de gospel especial, identificable.
1 / Bangladesh Story: Cuando Ravi Shankar era medium de los Beatles.
Era el primero de Agosto de 1971, el Madison Square Garden esta repletó, el corazón del mundo estaba allí, se divertía, corazones y mentes por una pequeña república que se liberaba de Pakistán, al hacerlo millones de refugiados se fueron a la India, tragedias lejanas en un mundo que apenas conoce a esa cultura, mundos de crónicas rojas, porque lamentablemente esos países en la información cotidiana, solo son protagonistas de tragedias gigantes, no existen en su perfil en los medios, para otra cosa.
Por eso, desde 1971 hasta el momento, si no ha ocurrido una tragedia, es muy problable que ya nadie sepa dónde queda la pequeña republica que George Harrison protegió con un concierto con la ayuda de sus amigos Bob Dylan, Eric Clapton y Ringo Star, entre otras muchas estrellas.
Aquella era una fiesta de rosas amarillas, no hay que olvidar que Woodstock, aquellos tres días que cambiaron el mundo apenas había pasado y sus ecos eran fuertes, en esos años 1968, 1969 y 1970, del siglo 20.
Cuando apenas recuerdo, cuando lo imagino, me da una alegría tremenda, me nace un pálpito agradable, saber que gocé todo aquello como un enano obsesivo y perverso, como un diablillo de mi tiempo, melómano de rutas furtivas e infatigables y juro que no me arrepiento, ¡¡jamás, jamás!!.
Me pregunta un duende de la memoria: ¿ No fue hermoso todo aquello ? . A lo que respondo con todo el alma ahogada : SSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSIIIIIIIIIIIIIII.
El mundo de la buena música pierde a un hombre talentoso, brillante, ganador de honores musicales por su talento, su excelente capacidad como vocalista, compositor y músico.
Entonces, El Beatles Negro ha partido, le Beatles Noir est parti , il Beatle Negro ci ha lasciati, The Blacks Beatle is gone, que el lírico vuelo sea tranquilo y sublime… (cfe)