Señor director:
El servicio de transporte público sigue siendo un caos y un peligro.

Las unidades que ofrecen el servicio que la población conoce como “concho” están en condiciones más que precarias.

Circulan sin luces, con puertas sujetadas con ganchos, asientos destruidos y hasta sin frenos. Una amenaza latente a la vida del usuario.

La inmensa mayoría de esos carros públicos tienen más de 12 años “conchando”.

No será tarea fácil sustituir esas unidades por vehículos en mejor estado, pero algo hay que hacer para evitar que esas “chatarras” continúen circulando.

Un programa de sustitución de los actuales carritos puede comenzar beneficiando a los choferes humildes, con cargas familiares y cierta edad límite.

Atentamente,
Lucindo Villalona C.

Recomienda  plan
Control venta de alimentos

Señor director:
El expendio y manipulación de los alimentos en el país, tradicionalmente, ha carecido de normas de control sanitario.

La venta ambulante de comidas, en especial durante las mañanas y al mediodía, se ha expandido en la Capital y en las principales ciudades.

Sabemos que mucha gente se dedica a esos oficios, como una única forma de ganarse el sustento de la familia, lo cual es legítimo.

Las autoridades de Salud Pública, sin embargo, se han descuidado en mantener un programa efectivo que evite enfermedades a quienes consuman esos alimentos.

No sería demasiado trabajo para el personal responsable de la salud diseñar un plan preventivo, de vigilancia y control de alimentos.

Atentamente,
Zoila M. Perdomo P.