Señor director:
Se ha hecho costumbre, cuando ocurre un accidente de tránsito, que grupos de desalmados se dediquen a saquear las pertenencias de los lesionados.

La situación se presenta en autopistas y carreteras, sin que ninguna autoridad evite tan reprochables actos.

Se han dado casos de personas accidentadas que, al quedar inconscientes por heridas y contusiones, se les despoja de prendas y dinero.

Sabemos que en cualquier lugar, y circunstancia, los malhechores viven al acecho de sus víctimas.

Pero nuestras autoridades policiales deben convertirse en celosos guardianes de los bienes ajenos.

Al menos, eso es lo que mandan los reglamentos.

Atentamente,
Amarilis Santana C.

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Exhorta
Autoridades asumir tareas

Señor director:
No puede ocultarse que las fuertes lluvias y vientos huracanados de los últimos días han ocasionado grandes daños materiales, y enorme desasosiego, a miles de familias.

Tampoco puede negarse que en la agricultura se ha producido bajas sensibles y que la infraestructura vial se deteriora.

A los que residimos en la capital nos ha correspondido también encarar las inundaciones, la acumulación de grandes charcos, con la consiguiente obstrucción del tránsito.

Y más basura y desperdicios no puede acumular la ciudad, en las barriadas y en las grandes urbanizaciones.

Eso significa que las autoridades, en cada demarcación, tendrán que trabajar duro para devolver la normalidad a sus respectivos municipios.

Atentamente,
Belarminio J. Cordero