Señor director:

Como si se tratara de una producción silvestre, el país cuenta con una sorprendente cantidad de músicos populares.

Orquestas merengueras, bachateras o los llamados grupos “de calle”, tienen entre sus miembros a diestros tecladistas, saxofonistas, percusionistas o trompetistas.

Es decir, que además de buenos peloteros, tenemos una cosecha de instrumentistas interminable.

No es un mal ejemplo. Tenemos que congratularnos de que pongan sus talentos al servicio de buena causa.

Ojalá podamos tener excelentes ingenieros, arquitectos, agrónomos, médicos y contables con empleos estables.

Aunque también estamos necesitados de electricistas, plomeros, ebanistas y albañiles.

Atentamente,

Saúl J. Perdomo N.

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Recomienda
A la población defender  pesos

Señor director:

Los precios de los alimentos y bienes primarios continúan su imparable ascenso.

No hay día en que amas de casa y la población en general no se tope con productos de consumo diario cotizados por las nubes.

Y ni hablar de los combustibles y otros derivados del petróleo.

Ante la escalada alcista, los dominicanos debemos aprender a defender nuestro dinero.

No hay alza de sueldo o salario que pueda compensar las drásticas subidas de los artículos que demanda la familia.

Debemos rechazar  aquellos productos que nos oferten fuera de los límites aceptables.

Hay que defender el peso y hasta los centavos, como expresó en días recientes un dirigente empresarial.

Atentamente,

Gladys J. Martínez